Esquerra se rebela contra el jaque mate de Quim Torra y Ada Colau
El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès: "Lo que yo no haré es subordinar el presupuesto del Ayuntamiento de Barcelona al de la Generalitat"
El vicepresidente de la Generalitat y conseller de Economía, Pere Aragonès, alerta de la dificultad de continuar con la legislatura sin un presupuesto para la Generalitat en 2020 y ha cuestionado el acuerdo de intenciones del presidente de la Generalitat, Quim Torra, y de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de intercambiar apoyos para sacar adelante las cuentas de ambos gobiernos.
«Si no hay un presupuesto de la Generalitat para 2020 es muy difícil que una legislatura normal continúe», subrayó Aragonès, de entrada. En una entrevista concedida a Efe, Aragonès advirtió de lo complicado de agotar el mandato actual si el Govern no consigue aprobar las cuentas para 2020, a pesar del empeño del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de seguir adelante como sea.
El conseller subrayó que la Generalitat funciona actualmente con las cuentas de 2017, pero recordó que esos mismos presupuestos se tuvieron que prorrogar en 2018 porque «hasta junio se aplicó el artículo 155 de la Constitución» y también en 2019, en este caso por falta de mayoría parlamentaria para sacar adelante las cuentas.
Esquerra refuerza la presión
El vicepresidente de la Generalitat confirmó que aprobarán el anteproyecto de ley de presupuestos el próximo mes de octubre: «Lo llevaremos al Parlament y esperamos que pueda haber debate, que se pueda mejorar y se pueda aprobar», dijo Aragonès.
En caso de no aprobarse las cuentas, advirtió de que «es evidente que continuar con normalidad con la legislatura funcionando con los presupuestos de cuatro años antes comportará distorsiones que dificultarán mucho la gestión de la legislatura desde el punto de vista político, pero también social y económico».
«Para que la legislatura tenga continuidad hay que reforzar la mayoría parlamentaria», y ello pasa por «aprobar un nuevo presupuesto», ha insistido.
Aragonès explicó que en septiembre iniciará una ronda de contactos con los grupos parlamentarios para hablar sobre el proyecto de presupuestos de 2020, y remarcó que dialogará «con todos los grupos, como lo hemos hecho siempre», y sin discriminar a nadie.
El eje Quim Torra-Colau
Hace unos días la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, planteó al gobierno catalán la conveniencia de hablar «seriamente» tanto de los presupuestos de la Generalitat como de los del Ayuntamiento de Barcelona, pero Aragonès descartó vincular ambos asuntos.
«Lo que yo no haré es subordinar el presupuesto del Ayuntamiento de Barcelona al de la Generalitat», ha asegurado el número dos del Govern. El vicepresidente comentó que «evidentemente, si hay entendimiento en un ámbito, claro que puede facilitar el entendimiento en el otro», pero ha dejado claro que «son procedimientos diferentes, con necesidades y prioridades propias».
Gasto social e inversión en seguridad
Preguntado por la disposición del PSC a hablar sobre el presupuesto de 2020, dijo que celebra que «por parte de los comunes y del PSC se tenga una predisposición mejor a la del año pasado».
Por otra parte, Aragonès subrayó que las cuentas de 2020 tendrán como prioridad principal el gasto social y que también se prestará atención a cuestiones como la seguridad, ante la falta de efectivos del cuerpo de Mossos d’Esquadra, y el transporte público y el medio ambiente.
En cuanto a la marcha de la economía catalana, aseguró que está creciendo en torno al 2% y que de cara al resto del año lo hará «por encima» de ese nivel.
Preguntado por si la falta de presupuestos de la Generalitat perjudica a la economía catalana, comentó que lo que le «afecta realmente» es la «falta de soberanía del gobierno catalán», puesto que el 85% de los ingresos de la Generalitat dependen del modelo de financiación autonómico, sobre los que no tiene «capacidad de decisión».