ERC usará a su militancia en la negociación con Sánchez
Esquerra efectuará el lunes una consulta entre sus bases para fijar sus condiciones a la investidura de Sánchez
ERC someterá a consulta entre sus bases su eventual apoyo a la investidura de Pedro Sánchez, y lo hará lanzándole a la militancia una pregunta formulada en unos términos diseñados para mantener alto el precio de su abstención, imprescindible para que a Sánchez le salgan las cuentas.
«¿Está de acuerdo con rechazar la investidura de Pedro Sanchez si previamente no hay un acuerdo para abordar el conflicto político con el Estado a través de una mesa de negociación?». Esa es la pregunta que Esquerra planteará en la consulta a sus bases que efectuará el próximo lunes día 25 entre las 9 de la mañana y las 8.30 de la tarde, según ha adelantado El Periódico.
La maniobra de la dirección de la formación que preside Oriol Junqueras busca afianzar con esa pregunta la postura que ha defendido en el arranque de los contactos de cara a la investidura: la de que de entrada aboga por el no salvo que el PSOE acepte un diálogo «entre iguales», «sin condiciones» -es decir, sin renuncias previas a hablar de autodeterminación-, con un calendario claro y con garantías de cumplimiento de los acuerdos que se alcancen, una condición esta última que podría requerir la recuperación de la figura del «relator», aunque los republicanos no explicitan esa reclamación.
ERC maniobra para arrancar la negociación
La formulación de la pregunta está diseñada para fomentar una respuesta afirmativa. Y si ese sí se impusiera en la consulta del lunes, Sánchez ya no podría contar con tensar la negociación para acabar torciendo el brazo a ERC sin acabar de satisfacer sus exigencias, como sí sucedió en julio, cuando los de Junqueras optaron por abstenerse en la segunda vuelta de aquel intento fallido de investidura pese a que los socialistas no habían puesto ninguna contrapartida sobre la mesa.
De todos modos, la pregunta no fija ninguna condición referida al formato que debería tener esa mesa de negociación. Es decir, no va más allá de la exigencia ya reiterada por ERC de regresar al escenario negociador esbozado en la reunión que Sánchez y Quim Torra mantuvieron en Pedralbes en diciembre del año pasado.
ERC mantiene en todo caso contactos en paralelo con JxCat, que dice que Pedralbes es condición necesaria pero no suficiente, y con la CUP a la búsqueda de una posición conjunta en la votación de investidura, un escenario que no parece probable salvo que ese consenso gire en torno al no a Sánchez, porque los cuperos ya han dejado claro que no piensan facilitar la investidura en ningún caso.
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