ERC activa la voladura controlada de la investidura de Puigdemont

Carles Puigdemont ha descubierto que no tiene por qué permanecer huido en Bélgica, sino que también puede permitirse otras escapadas a países como Dinamarca, adonde este lunes se desplazó, con el consentimiento del juez Llanera, para protagonizar una tensa conferencia. Sus paseos por Europa le permiten ganar perímetro para su operación de propaganda, pero en España las cosas se le complican, ya que ERC prepara una voladura controlada de su investidura.

Esquerra ha asumido de forma privada que Puigdemont no tiene recorrido como presidente de la Generalitat y que es necesario poner en marcha una alternativa, pero el partido republicano necesita tiempo y no tiene ningún inconveniente en mantener de cara a la galería que va a colaborar para restituirlo en el cargo. Tanto es así que el presidente del Parlament, Roger Torrent, propuso formalmente este lunes a Puigdemont como candidato a la investidura después de haber concluido su ronda de contactos con los líderes catalanes.

Torrent incluso escribió una carta a Mariano Rajoy para proponerle abordar el asunto en persona. Al cabo de poco recibió un sonoro portazo (a través del PP), ya que el presidente del Gobierno no tiene ningún interés en dar salida política a los problemas judiciales de Puigdemont. Y nadie en ERC puso el grito en el cielo porque los republicanos están a lo suyo. «Junts per Catalunya (JpC) tiene que poner ya encima de la mesa cómo piensa realizar la investidura (a distancia)», urgió el portavoz de ERC, Sergi Sabrià.

La tensión entre Puigdemont y ERC va en aumento

La tensión entre Puigdemont y ERC sólo hace que aumentar. El ex presidente de la Generalitat se muerde la lengua por el momento, ya que tiene muchos líos que atender. Ninguno tan importante como el pulso que mantiene con la Justicia española. El juez Pablo Llanera y la defensa de Puigdemont protagonizaron este lunes una interesante batalla en la que dominó, sobre todo, el cálculo.

Una vez aterrizó en Dinamarca, la Fiscalía pidió a Llarena reactivar la euroorden para arrestar a Puigdemont. Llarena consideró la petición, pero acabó por rechazarla. ¿Por qué? Porque el juez interpretó el viaje de Puigdemont como una maniobra destinada a provocar su detención para facilitar su investidura, ya que el arresto le colocaría en una situación diferente a la de huido de la justicia. En palabras de Llarena: «El investigado busca pertrecharse de la justificación de que su ausencia (en la sesión de investidura) no responde a su libre decisión como prófugo de la justicia, sino que es la consecuencia de una situación que le viene impuesta».

Puigdemont había estudiado a fondo la jugada con sus abogados y apareció de madrugada en el aeropuerto de Chareloi para tomar un avión de Ryanair a las 6.55 horas con dirección a Copenhague, adonde aterrizó pasadas las 8.30 horas en medio de una notable expectación. A las 14.00 horas apareció en la Universidad de Copenhague, se dirigió al atril y comenzó a despacharse contra la democracia española.

Puigdemont, ante un duro interrogatorio

«La sombra de Franco aún es larga en España», dijo. Pero, en esta ocasión, Puigdemont tuvo que enfrentarse a la contundencia de la profesora Marlene Wind, experta en relaciones con la UE. «¿Democracia es solo hacer referéndums y encuestas de opinión o también respetar la legalidad y la Constitución?», le preguntó. Y siguió: «¿De dónde viene esta urgencia por la independencia? A mi entender, Cataluña es la región más rica de España. ¿Son solo unos malcriados que están intentando librarse de los pobres?»

El ex presidente salió del paso como buenamente pudo con más ataques a España y a la UE por apoyar a Rajoy. Finalmente, Puigdemont acabó por formular una nueva propuesta política para salir del atolladero en el que se halla el independentismo. Su última idea consiste en celebrar un referéndum en toda España. «Nadie ha propuesto que vote toda España. Podría ser una solución o un punto de partida», planteó.

Puigdemont propone ahora un referéndum en toda España

Este martes su improbable proceso de investidura continúa adelante. La Mesa del Parlament se reúne y podría impulsar los primeros acuerdos para impulsar su designación y, por tanto, podrían activarse las primeras impugnaciones. Serán los primeros explosivos para una voladura controlada cuyos preparativos se van a alargar durante días.