El Supremo achaca "falta de compromiso" a la justicia belga

En el Tribunal Supremo no ha sentado nada bien la decisión del juez belga que ha rechazado la entrega de los exconsellers Toni Comín, Meritxell Serret y Lluís Puig por «defectos de forma en el procedimiento, al estimar que no tiene «equivalencia» con la orden de detención nacional.

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha indicado que respeta la decisión, contra la que no cabe recurso, según ha admitido la fiscalía, pero ha avanzado que los tribunales españoles analizarán si se puede subsanar el error «de forma» argumentada. Fuentes de la Sala de lo Penal del Supremo citadas por EFE han admitido que todavía están pendientes de recibir la resolución para estudiarla, pero han reprochado de manera no oficial al magistrado una supuesta «falta falta de compromiso» a la hora de prestar colaboración judicial a España.

Consideran que solo el desconocimiento del ordenamiento jurídico español permite obviar el auto de procesamiento en el que descansa la euroorden

Las mismas fuentes recuerdan que el 21 de marzo de 2018 se dictó un auto de procesamiento en donde se expresaban los hechos y los argumentos jurídicos por los que se consideraba a Comín, Serret y Puig ya procesados, y por los que, a esa misma fecha, el instructor dictaba prisión como medida cautelar.

Sobre esa misma argumentación del auto de procesamiento, y a petición del ministerio fiscal, el día 23 de marzo es sobre la que se dictó un auto ordenando librar las órdenes europeas de detención. Las fuentes del Supremo recuerdan que, en España, un auto de procesamiento es la resolución judicial con más desarrollo argumental a excepción de la sentencia.

Por todo eso, consideran que solo el desconocimiento del ordenamiento jurídico español permite obviar el auto de procesamiento en el que descansa la euroorden, como entiende el Supremo que ha hecho el juez belga.