El sector energético ‘desmonta’ el impuesto al diésel de Sánchez
Los principales representantes del sector energético en España critican el 'sablazo' al diésel que implantará el Ejecutivo socialista
Los planes fiscales de Pedro Sánchez siguen sin convencer. A las críticas iniciales de la banca sobre un impuesto a las grandes entidades financieras, se suman las que este jueves vertieron los principales representantes del sector energético en España, que señalaron los peligros de los planes del Ejecutivo socialista para penalizar al diésel.
El primero en hacerlo fue el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz. En palabras suyas, «una penalización añadida al diésel va a aumentar las emisiones de CO2» y provocaría daños al sector de fabricación automovilístico en España, que recordó que es el segundo fabricante europeo de automóviles.
Imaz afirmó que aquí todos están haciendo esfuerzos y recordó que las emisiones de CO2 de los vehículos actuales de gasolina son un 24% menores que hace 20 años y las de los diésel un 25,2%, con lo cual se han rebajado las emisiones por cada kilómetro recorrido.
Añadió que un impuesto al diésel lo que haría es que hubiera más consumidores que dejen de comprar ese tipo de coches y adquirieran de gasolina, lo que no redundaría en una reducción de las emisiones de CO2.
Los efectos del impuesto al diésel: la gente comprará vehículos con gasolina
Además, apuntó los efectos que tendría sobre la recaudación la sustitución de todos los vehículos que usan diésel y gasolina por eléctricos, que pasaría de los 16.000 millones de euros que se obtiene por vehículos ligeros a través del impuesto de hidrocarburos a 3.000 millones.
Afirmó que el problema que hay son los vehículos diésel antiguos, que contaminan más que los actuales, y ha afirmado que promover una renovación del parque automovilístico sería «más justo socialmente», pues se ayudaría a colectivos de baja renta, sería más eficiente para la competitividad de la economía y ayudaría a mejorar la reducción de emisiones de CO2.
La propuesta «no tiene ningún sentido»
Por su parte, el presidente de BP España, Luis Aires, ha considerado que no tienen ningún sentido las medidas para subir la fiscalidad al diésel y ha criticado la propuesta del comité de expertos en transición energética, por la que se establecía gravar las emisiones de óxido de nitrógeno, de azufre y partículas de los vehículos, que ha señalado que no tienen que ver con el cambio climático.
También criticó la propuesta de sufragar con un impuesto nuevo el déficit eléctrico sólo gravando a los carburantes y que sean sólo los usuarios de diésel y gasolina los que paguen algo que fue generado por decisiones de política energética y de inversión de las empresas, así como que sean los que paguen unas carreteras que también van a usar los vehículos eléctricos.
En su opinión, tiene mas sentido que se suba el precio por tonelada de CO2 emitida y que se recaude de todos los emisores.
Luis Aires (BP España) cree que tiene más sentido que se suba el precio por tonelada de CO2 emitida
La consejera delegada de Iberdrola España, Ángeles Santamaría, cree que hay que favorecer la introducción de renovables en el mix eléctrico, ya que reducirá los precios, y ha dicho que se deben adoptar «decisiones valientes» para avanzar en una mayor electrificación.
Por su parte, el consejero delegado de Acciona Energía, Rafael Mateo, criticó la actual fiscalidad sobre la energía, que considera que actualmente tiene sólo «efectos recaudatorios» y cree que hay que aumentar la fiscalidad a las fuentes de energía emisoras, pues no tiene sentido que se pague un 7% por generar electricidad tanto si se hace por una planta que contamina que por una instalación que no emite CO2.
Indicó que hay que reformar la fiscalidad y establecer unas señales económicas claras y «contundentes» para que España no se quede atrás en la nueva «revolución industrial» que va a suponer la transición energética.
Mateo añadió que si el carbón es la principal fuente emisora de CO2 «habrá que cerrarlo» y ha agregado que los puestos de trabajo de esa actividad podrán ser suplidos en sectores como la fabricación de aerogeneradores y baterías.