El Gobierno enmienda al TS con el impuesto de las hipotecas

El martes, tras dos días de deliberación, el Tribunal Supremo (TS) decidió por un escaso margen que el impuesto de las hipotecas debía correr a cargo del cliente. Así se desdijo de una sentencia -que ellos mismos decretaron- por la cuál eran los bancos los que debían pagar este tributo. Sin embargo, el Gobierno de Pedro Sánchez estudia ajustes en la ley hipotecaria para que las entidades carguen con más gastos.

Ante el rechazo popular a la decisión tomada el martes por el TS, el PSOE ha anunciado en su cuenta de Twitter que les corresponde ahora «conocer la motivación» del fallo y «tomar decisiones». Aún así, defiende que respeta la sentencia del Tribunal Supremo. Se espera que el Consejo de Ministros del jueves fije una posición.

Así, el Gobierno baraja obligar por ley a que la banca cargue con el impuesto de actos jurídicos documentados (AJD). Esta medida se aplicaría a las hipotecas firmadas a partir de ahora, y no a los del pasado, con lo que la retroactividad -que es lo que más temían las entidades y podía costar hasta 5.000 millones a las comunidades– quedaría fuera de la mesa.

Ley en tramitación

La modificación de la ley hipotecaria no sería complicado, ya que se encuentra en tramitación parlamentaria porque Bruselas exige que se traspongan las normas europeas. Los partidos ya se encontraban negociando pasar más gastos a la banca.

Así, con la opinión popular en contra de la sentencia del TS, se espera que la medida tenga el apoyo de la oposición y un amplio apoyo parlamentario. De hecho, el Partido Popular lamentó la incertidumbre causada y reclamó que se clarifiquen los criterios de la decisión del tribunal.

Además, el secretario general del grupo parlamentario del PP en el Congreso, José Antonio Bermúdez, instó a «tomar medidas» desde el Congreso aprovechando la tramitación del proyecto de ley de crédito inmobiliario.

Albert Rivera califica los actos del TS de «espectáculo» e «incomprensibles»

Albert Rivera, el líder de Ciudadanos, se pronunció en Twitter donde calificó los actos del Tribunal Supremo de «espectáculo» e «incomprensibles» por la incertidumbre generada mientras se llegaba a una decisión.

Por su parte, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, -que había anunciado movilizaciones en caso de que la sentencia fuera favorable a los bancos- aseguró que la decisión del TS pone «en entredicho» la independencia del Supremo y debilita la democracia. “La vergüenza y la rabia deben convertirse en una gran movilización cívica para defender los derechos de la mayoría frente a los privilegios de una minoría”, añadió.

La banca defiende la seguridad jurídica

Tras la decisión del TS, las patronales del sector (AEB, Ceca y Unacc) enviaron un comunicado en el que defendían al alto tribunal: «La decisión adoptada hoy por el Tribunal Supremo preserva la seguridad jurídica necesaria para el buen funcionamiento del mercado«.

Por el contrario, las asociaciones de consumidores calificaron el fallo de «bochornoso» por perjudicas a «más de 12 millones de familias en España».