Los presos del 1-O estarán en la calle en un mes (según sus defensas)
El abogado de Joaquim Forn está convencido de que el Tribunal Supremo dejará en libertad a los políticos independentistas presos cuando acabe el juicio
Los políticos independentistas presos que son juzgados en el Tribunal Supremo confían en obtener la libertad provisional al finalizar el juicio. Esperan que se les conceda esta gracia mientras no se dicte la sentencia.
Las defensas de los presos entienden que, si aún no les han concedido la libertad provisional, es para garantizar que estén a disposición del Tribunal Supremo mientras dure el juicio. Así se evita el riesgo de huida en plena vista. Sin embargo, consideran que no tiene sentido que se les siga privando de libertad mientras esperan la sentencia.
En declaraciones a RAC1, el abogado Xavier Melero indicó que, cuando acabe el juicio, previsiblemente en la segunda semana de junio, los procesados en situación de cárcel preventiva quedarán en libertad. Melero es el defensor de los exconsejeros Joaquim Forn y Meritxell Borràs.
La sentencia tardará meses. No se prevé que se haga pública antes de octubre. Melero descarta que se condene a los procesados por los delitos de rebelión y sedición, aunque admite que pueden serlo por los de desobediencia al Tribunal Constitucional.
En el mismo sentido, las defesas de otros acusados por el referéndum del 1-O indicaron poco después del inicio del juicio que cuando finalizasen las sesiones se abriría una “ventana”: la posibilidad de salir en libertad hasta que se dicte sentencia.
Salidas puntuales
Oriol Junqueras es el caso más complejo. Con el ex presidente Carles Puigdemont prófugo de la justicia, el que era su vicepresidente es el procesado de mayor rango político. Sin embargo, el Tribunal Supremo ya ha autorizado que Junqueras, así como Raül Romeva, Josep Rull, Jordi Turull y Jordi Sánchez puedan salir puntualmente de la cárcel el 21 de mayo para recoger el acta de diputado y asistir a la sesión de constitución del Congreso.
A diferencia de la mayor parte de las defensas, Melero nunca ha criticado la actuación de Manuel Marchena, presidente del tribunal que juzga a los acusados por el referéndum del 1-O. “No criticaré el árbitro mientras el partido esté en juego, haría un mal favor a mi cliente: lanzaré alabanzas al señor Marchena hasta el último día”, según dijo a la emisora catalana.
En cambio, el Consejo de la Abogacía Catalana censuró ayer lo que calificó de “presiones” del tribunal a los abogados de Jordi Cuixart, presidente de Òmnium Cultural. En un comunicado, el mencionado consejo censura que, desde el tribunal, se exprese «profundo malestar» por la actitud de algunos abogados, que la sala cree están incurriendo en provocaciones que bordean los límites de los códigos deontológicos. Se referían a los letrados Benet Salellas, Marina Roig y Àlex Solà.
El Consejo de la Abogacía Catalana agrupa a todos los colegios profesionales de abogados de Cataluña. Desde el pasado diciembre lo preside Ignasi Puig, decano del colegio de Terrassa. En artículos a la prensa, Puig se mostró crítico con la actuación del tribunal que preside Marchena.
El consejo catalán intentó enviar observadores al juicio del próces. Sin embargo, el tribunal lo rechazó por considerar que no hacía falta porque el juicio se retransmite en directo y cualquiera puede ser observador desde su casa.