Borrell seguirá la estela de Morenés contra las mentiras del “procés"

El ministro de asuntos exteriores Josep Borrell prometió dar seguimiento a la estela del embajador de España en EEUU, Pedro Morenés, y seguir plantando cara a las «falsedades» del «procés».

De la misma forma en que Morenés se permitió corregir «la propaganda que difunde» el presidente de la Generalitat, Quim Torra, Borrell lamenta que «se ha proyectado la imagen de una España neofranquista».

En una entrevista de El Periódico, Borrell asegura que la imagen exterior de España es afectada por «una propaganda negativa y deformante». «Tenemos que volver a ponerla en su sitio contando las cosas como son», dijo.

Borrell: «Se ha proyectado la imagen de una España neofranquista»

«No digo que no tengamos problemas, ni que no hayamos cometido errores, pero se ha proyectado la imagen de una España neofranquista, un verdadero ‘revival’ de la leyenda negra», criticó el ministro de exteriores.

Sobre las declaraciones de Torra en su reciente visita a Washington, y la respuesta del embajador Morenés, Borrell dijo: «Ningún embajador se queda impasible ante ataques a su país como los que profirió Torra».

«Torra mantiene el mismo discurso descalificativo de España y de su sistema político y judicial, de una Cataluña colonizada, subyugada y expoliada, bajo una crisis humanitaria», agregó.

Borrell, sobre las embajadas catalanas: «No se les puede llamar embajadas, porque no lo son»

En cambio, a su parecer, «Morenés aportó datos internacionalmente contrastados sobre la calidad de nuestro sistema político y judicial».

Para transformar la imagen de España en el extranjero, Borrell propone hacer «diplomacia social y mediática», y «plantar cara cuando se digan falsedades».

«Algunas cosas son fáciles de explicar: si en España la justicia no es independiente, ¿cómo se entiende la condena del caso Gürtel, que hizo caer al Gobierno?», matizó.

Para terminar, el ministro afirmó que el gobierno de Pedro Sánchez no se opone a que la Generalitat tenga delegaciones en el exterior, «pero no se les puede llamar embajadas, porque no lo son».