Un nuevo capítulo para los motoristas: la DGT propone un cambio histórico
Con las nuevas modificaciones, la DGT pretende clarificar la normativa y responder a las demandas de las asociaciones de motoristas
Comentarios
España es un país con una gran pasión por las motos. Para conducir estos vehículos es necesario tener un carnet específico que autorice su a conducción . Existen varios tipos de carnets de moto dependiendo de la cilindrada, la potencia y la experiencia del conductor.
La Dirección General de Tráfico (DGT) tiene unas normas especificas para los conductores de moto y de cara a 2025 han anunciado un cambio significante, considerado por los conductores como un avance histórico para su conducción, mejorando su seguridad.
Nuevas normas para motos
Según un artículo publicado en la revista mensual de la DGT, Tráfico y Seguridad, el organismo está trabajando en varias modificaciones relacionadas con el uso de carriles y arcenes para motocicletas en condiciones especiales, como mal tiempo y atascos.
Estas modificaciones permitirán que motocicletas, grúas, vehículos de emergencia y otros servicios prioritarios puedan circular por el arcén sin incurrir en infracciones. La medida tiene como objetivo mejorar la seguridad y la fluidez del tráfico en situaciones complicadas, especialmente para los motociclistas.
En concreto, los motociclistas podrán usar el arcén derecho cuando las condiciones meteorológicas adversas hagan peligroso circular por los carriles habituales, debido a la baja visibilidad o al riesgo de ser atropellados. Asimismo, podrán utilizar el arcén en situaciones de atasco.
Sin embargo, habrá ciertas restricciones para garantizar la seguridad. Las motocicletas que circulen por el arcén no podrán superar los 30 km/h y deberán ceder el paso a ciclistas y a otros vehículos obligados a usar el arcén, como tractores o coches con averías mecánicas.
Además, la DGT está considerando la legalización completa del uso de intercomunicadores en los cascos de los motociclistas. Hasta ahora, la normativa vigente ha sido ambigua, permitiendo sanciones por el uso considerado «incorrecto» de estos dispositivos, como escuchar música en lugar de comunicarse.
