La jugada de ING para acabar con los fraudes online
Las entidades financieras cada vez prestan un mayor número de servicios dirigidos a las compras a través de internet
Las ciberestafas están a la orden del día. Mientras que los usuarios son más cautos y prestan una mayor atención a la hora de comprar por internet, las entidades financieras cada vez prestan un mayor número de servicios dirigidos a este tipo de operaciones.
Un ejemplo es el ‘Seguro Compra Online’, que ofrece el banco ING a los clientes que disponen de tarjeta bancaria y la utilizan para realizar compras online.
Qué es
Los clientes de la entidad holandesa cuentan con un seguro para llevar a cabo sus compras online, con el que podrán ahorrarse quebraderos de cabeza, sin tener que realizar la contratación aparte ni pagar por el servicio.
A través de las compras que se lleven a cabo con las tarjetas del banco, los usuarios pueden recuperar su dinero en pedidos de más de 30 euros cuando tengan problemas con algunas compras y la tienda no se haga responsable.
Concretamente, podrán recuperar la totalidad del pago, incluyendo el embalaje, gastos de envío e impuestos en las siguientes situaciones:
- No se ha entregado el producto en la fecha que acordada y han pasado 30 días desde entonces.
- El producto está defectuoso, roto o incompleto.
- El producto no se corresponde con lo comprado.
Qué cubre el seguro
La entidad financiera cubre casi cualquier tipo de producto, como ordenadores, ropa o zapatos. Por el momento, no obstante, no incluye compras de experiencias, como viajes o entradas, plantas, animales o comida a domicilio.
Cómo reclamar
A través de la aplicación o la página web, el cliente habrá de acceder al movimiento correspondiente a la compra a través de ‘Cuentas’ o ‘Tarjetas’.
Después de hacer clic en el banner de ‘Compra protegida’ que aparece en la parte inferior, será necesario seguir las instrucciones para completar la reclamación.
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Compra realizada y tramitada, como que tienes que hacer un estudio de donde compras y pedir datos de la sociedad y sistemas de devoluciones. De risa el seguro no lo cobras ni de coña
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