El Imserso sorprende con Mallorca a un precio increíble

Mallorca es una joya del Mediterráneo que ofrece una combinación única de paisajes impresionantes, cultura rica, y una cálida hospitalidad. Para los jubilados y pensionistas que viajan con el programa del Imserso, la isla balear es un destino perfecto para disfrutar de unas vacaciones relajantes y llenas de experiencias inolvidables. Con opciones asequibles para todos los gustos y necesidades, es mucho más que sol y playa.

Este destino, incluido en el Lote 2 de los viajes ‘Zona Costera Insular: Baleares’ del Imserso, ofrece opciones de estancia en la isla balear por menos de 300 euros, con diferentes modalidades de viaje según la duración de la estancia y si se incluye o no el transporte.

Para aquellos que prefieren un paquete completo, el Imserso ofrece una estancia de ocho días y siete noches en Mallorca por 267,63 euros, con transporte incluido. Sin embargo, este precio puede variar si se elige una habitación individual en lugar de una doble, lo que conlleva un coste adicional.

También existen opciones más económicas para quienes deseen organizarlo con su propio transporte. Una estancia de diez días y nueve noches está disponible por 253,77 euros, y una de ocho días y siete noches por tan solo 210,47 euros. Estas opciones son ideales para aquellos que prefieren flexibilidad en sus planes de viaje.

Un paraíso para relajarse con el Imserso

Mallorca es uno de los destinos más solicitado en el Imserso. Famosa por sus playas de arena dorada y calas de aguas cristalinas. Algunas de las playas más populares entre los visitantes son Playa de Muro, Es Trenc, y Cala Millor, que ofrecen amplios espacios para disfrutar del sol y del mar. Para aquellos que buscan un ambiente más tranquilo, las calas escondidas como Cala Mondragó o Cala Varques son perfectas para disfrutar de un día relajante rodeado de naturaleza.

Además, la capital de la isla, Palma de Mallorca, es un destino cultural fascinante. La imponente Catedral de Santa María de Palma, conocida localmente como «La Seu», es una obra maestra del gótico que domina el horizonte de la ciudad. No puedes perderte un paseo por el casco antiguo, con sus calles adoquinadas y sus edificios históricos. Visita el Palacio Real de la Almudaina y el Castillo de Bellver, que ofrecen vistas panorámicas impresionantes de la ciudad y la bahía.

Para los amantes de la naturaleza, la Serra de Tramuntana es un paraíso para el senderismo y el excursionismo. Esta cadena montañosa, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, ofrece rutas para todos los niveles, desde paseos tranquilos hasta caminatas más desafiantes.

Otro aspecto clave es la gastronomía, uno de los atractivos que no puedes dejar de explorar. Los platos típicos como el tumbet, un guiso de verduras con carne o pescado, y la sobrasada, un embutido tradicional, son imprescindibles para degustar los sabores locales.

Además, la isla cuenta con numerosos mercados y restaurantes donde se pueden disfrutar de pescados frescos, mariscos, y deliciosos postres como la ensaimada, un dulce tradicional que es perfecto para acompañar con un buen café.