Estos son los nuevos derechos laborales para las empleadas de hogar
La nueva norma ha sido desarrollada en diálogo con organizaciones sindicales y plataformas representativas del sector
El Gobierno ha dado luz verde a la protección de la seguridad y salud en el trabajo doméstico, cumpliendo así su compromiso de otorgar derechos laborales a las trabajadoras del sector.
Con la aprobación de una nueva normativa para regular el trabajo en el hogar, España pone fin a una desigualdad que han sufrido estos trabajadores, tanto económicamente como socialmente. Esta legislación posiciona al país como un líder en la vanguardia normativa en materia de prevención de riesgos laborales para las empleadas del hogar.
Prevención de riesgos laborales
El nuevo reglamento garantiza el derecho a la seguridad y salud en el trabajo, adaptándose a las particularidades del ámbito doméstico, donde las empleadas del hogar trabajan en un entorno privado y a menudo para múltiples empleadores.
Se ha definido el derecho a la vigilancia de la salud, que incluirá un reconocimiento médico voluntario, único para cada trabajadora, incluso si trabaja para varias personas empleadoras.
Para aquellos empleadores que, por características personales o discapacidad, no puedan asumir directamente las obligaciones preventivas, se permite la delegación de estas responsabilidades a una persona de su entorno familiar o personal.
Medidas para facilitar la implementación laboral
Con el fin de que estos nuevos derechos no supongan una carga adicional para las familias y empleadores, se dispondrán de instrumentos públicos gratuitos:
Primero, el Ministerio de Sanidad promoverá la inclusión de reconocimientos médicos gratuitos en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud.
Seguidamente, el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) desarrollará una herramienta gratuita que facilitará a los empleadores el cumplimiento de las obligaciones relativas a la evaluación de riesgos. También elaborará una Guía Técnica para la prevención de riesgos laborales en el trabajo doméstico y pondrá a disposición de las trabajadoras un Protocolo en caso de acoso.
Por su parte, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) publicará una herramienta gratuita para garantizar el derecho a la formación.
Además, se establece que el empleador deberá proporcionar equipos de trabajo adecuados y adoptar las medidas necesarias para garantizar su uso seguro. Se regula el derecho de las trabajadoras a paralizar la actividad en caso de riesgo grave e inminente, sin que esto suponga ningún perjuicio para ellas.
Cambios en el servicio de ayuda a domicilio
El Real Decreto también incluye disposiciones específicas para los servicios de ayuda a domicilio (SAD). Dado que estas actividades se desarrollan en domicilios privados, se han establecido requisitos especiales para proteger la seguridad y salud de las trabajadoras en estas condiciones.
Las evaluaciones de riesgos laborales deberán incluir visitas presenciales a los domicilios donde se presta el servicio, y cualquier modificación en el domicilio deberá contar con el consentimiento previo de los titulares, siempre que sea necesario para garantizar la protección adecuada frente a los riesgos laborales.
La norma ha sido desarrollada en diálogo con organizaciones sindicales y plataformas representativas del sector, y culmina un proceso iniciado durante la pandemia de COVID-19. Este proceso incluyó la introducción de un subsidio especial, el reconocimiento del derecho a cotización para la prestación por desempleo, y la ratificación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo sobre los trabajadores domésticos.