La DGT alerta de esta peligrosa práctica en carretera
La DGT contribuye a una conducción más ordenada y segura, reduciendo significativamente el riesgo de accidentes en la carretera
En la carretera, la mayoría de los conductores saben qué prácticas deben evitar para no poder en peligro su vida ni la de los demás. No obstante, la Dirección General de Tráfico (DGT) advierte constantemente para evitar que ciertas prácticas de conducción sean comunes.
A través de sus Redes Sociales, han advertido de zigzaguear entre carriles. Esta es una práctica peligrosa que muchos conductores realizan con la intención de adelantar más rápido o sortear el tráfico. Sin embargo, esta conducta supone un riesgo significativo para todos los usuarios de la vía, ya que puede desencadenar frenadas bruscas, alcances y otras situaciones peligrosas.
Zigzaguear entre carriles es un riesgo para el resto de conductores, ya que puede provocar frenadas, alcances y otras situaciones peligrosas. El cambio de carril debe hacerse siempre con prudencia, siguiendo la regla RSM (Retrovisor-Señalización-Maniobra). #ConducirMejor pic.twitter.com/LcOZnge3Ic
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) September 3, 2024
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha desaconsejado repetidamente esta maniobra imprudente, enfatizando la importancia de realizar los cambios de carril con prudencia y siguiendo la regla RSM: Retrovisor-Señalización-Maniobra.
Consecuencias según la DGT
Cuando un conductor cambia de carril de forma abrupta y sin señalizar correctamente, los demás conductores tienen menos tiempo para reaccionar. Esto puede resultar en frenadas bruscas, que a su vez aumentan el riesgo de colisiones por alcance. Además, el constante cambio de carril puede desestabilizar el flujo de tráfico, creando situaciones de tensión y aumentando el riesgo de accidentes.
Otro aspecto a considerar es que esta práctica puede generar un efecto dominó en la carretera. Un solo conductor que zigzaguea entre carriles puede obligar a varios otros conductores a tomar decisiones rápidas y a menudo peligrosas, como frenar de golpe o cambiar de carril para evitar una colisión. Este tipo de situaciones no solo pone en riesgo a los involucrados directamente, sino también a otros usuarios de la vía que podrían verse afectados por el caos generado.
La DGT recomienda seguir la regla RSM al realizar un cambio de carril: Retrovisor, Señalización, Maniobra. Esta regla establece un proceso claro y secuencial para asegurarse de que el cambio de carril se realice de manera segura y previsible.