Credit Suisse mintió a sus clientes justo antes de caer asegurando que no había retiradas de dinero

Las autoridades suizas intervinieron Credit Suisse en marzo del pasado año permitiendo que los bonistas, por vez primera, perdieran toda su inversión en la entidad.

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Credit Suisse mintió a sus clientes sobre las elevadas cantidades de dinero que se estaban retirando de sus cuentas justo antes de su caída.

La entidad aseguró a sus clientes que, a pesar de las preocupantes noticias que ya se estaban publicando el pasado año sobre su situación, no se estaban registrando retiradas de dinero.

Sin embargo, como explicaron las autoridades financieras de Suiza en diciembre de 2023, solo en unos pocos días de marzo de retiraron miles de millones de euros de las cuentas del grupo.

El embajador en España de Antigua y Barbuda, Darío Item, está publicando datos comprometedores sobre la caída de Credit Suisse

Darío Item, abogado y embajador de Antigua y Barbuda en España, ha publicado dos correos electrónicos, enviados entre un inversor particular y directivos y empleados de Credit Suisse, en los que se informa, primero, de haberse registrado salidas de capital, para después asegurar que ese dato había sido un «error tipográfico» y que no se estaban produciendo retiradas.

El Gobierno suizo orquestó en unos días de marzo del pasado año un rescate de Credit Suisse que provocó un terremoto en el sistema financiero europeo y pérdidas millonarias para los propietarios de deuda contingente convertible del banco, también denominada AT1 (los tenedores de cocos).

Los inversores retiraron cerca de 35.000 millones de francos suizos de Credit Suisse entre el 13 y el 17 de marzo de 2023

Las autoridades suizas alteraron el orden de prelación de los títulos en las quiebras financieras, protegiendo a los accionistas de Credit Suisse con 3.000 millones de euros, pero dejando que los tenedores de cocos perdieran toda su inversión.

La decisión contraviene la tradicional jerarquía de asunción de pérdidas en caso de quiebra, donde los propietarios de bonos pueden registrar minusvalías, pero siempre después de los accionistas.

La intervención de Credit Suisse se saldó con la venta de la entidad a su principal competidor, el banco suizo UBS, por 3.000 millones de euros. Desde entonces, los tenedores de cocos de Credit Suisse han presentado cientos de demandas, en Suiza y en Estados Unidos.

Gracias a las informaciones que está publicando el embajador de Antigua y Barbuda en España, los inversores están accediendo a datos comprometedores para los antiguos ejecutivos de Credit Suisse y también para las autoridades financieras suizas.

En su última publicación, Darío Item advierte que los correos publicados «hacen sospechar que se estaba llevando a cabo una estrategia sistemática de desinformación piramidal«.

Esa estructura fraudulenta partiría «de las altas esferas de Credit Suisse (Axel Lehman y Ulrich Körner) con el apoyo de los ministros de Finanzas suizos, la FINMA [el regulador financiero suizo] y el SNB [el banco nacional de Suiza], y que llegaba hasta los niveles más bajos de la plantilla del banco, es decir, los que tenían contacto directo con los clientes».

Item cuenta la experiencia de un particular que, en marzo de 2023, se pone en contacto con su gestor en el banco suizo, alarmado por las noticias sobre la crítica situación de la entidad.

La respuesta que recibe el inversor en un primer correo, enviado a primera hora de la mañana del 16 de marzo de 2023, al que ha tenido acceso este diario, dice que los medios de comunicación están publicando informaciones incorrectas.

Pero el gestor de Credit Suisse admite en ese mismo correo -con copia a otros directivos del banco- que, en el primer trimestre del año, se han registrado «salidas de capital importantes«.

Unas horas después, a las 15.48 horas del 16 de marzo del pasado año, el mismo gestor envía un nuevo correo al inversor particular advirtiendo que se había producido un «error tipográfico», y que en realidad, no se habían registrado salidas de capital.

Tres días después de aquellos correos, UBS se hizo con Credit Suisse y los bonistas perdieron todo su dinero en el banco suizo.

El embajador de Antigua Bermuda en España destaca que, en diciembre de 2023, el regulador del sistema financiero suizo, la Finma, publicó un informe –Lecciones aprendidas de la crisis de CS– del que se desprende que entre los días 13 y 17 de marzo de 2023 se produjeron elevadas retiradas de capital del banco: el lunes 13 de marzo, 1.600 millones de francos suizos; 2.700 millones un día después; 13.200 millones el 15 de marzo; otros 17.100 millones el 16 de marzo y 10.100 millones retirados un día después.

En opinión de Darío Item, los correos enviados por el gestor de Credit Suisse y el informe publicado a finales del pasado año muestran que los directivos de la entidad sabían perfectamente lo que estaba ocurriendo -retiradas masivas de capital- y que trataron de ocultarlo a los clientes, permitiendo incluso inversiones en los productos afectados pocos días antes de la caída del centenario banco suizo.

El embajador recuerda las numerosas declaraciones que realizaron el presidente de Credit Suisse, Axel Lehmann, y el director ejecutivo, Ulrich Körner, días antes de la caída de la entidad, asegurando la supuesta fortaleza del banco.

«En resumen», concluye Darío Item, la intervención de Credit Suisse fue una «increíble torre de complots y mentiras que no solo dopó a los mercados manipulando artificialmente los precios de las acciones y bonos de Credit Suisse, sino que, lo que es más importante, causó un daño directo a los inversores».

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