Correos se resiste a publicar su Plan Estratégico y los sindicatos velan armas: «¿Hay alguien ahí arriba?»
Los representantes de la plantilla de Correos -más de 50.000 empleados- comienzan a inquietarse.
Los representantes de la plantilla de Correos -más de 50.000 empleados– comienzan a inquietarse.
El grupo ha anunciado un nuevo Plan Estratégico que todavía no ha precisado y los sindicatos, que ostentan un gran control sobre el funcionamiento de la compañía, temen que este contenga medidas de contención de costes laborales, en una situación crítica para la empresa pública dependiente de la Sepi.
«¿Hay alguien ahí arriba? ¿Alguien que nos pueda aclarar qué está pasando este verano en Correos (…)», dice un reciente comunicado de UGT.
El sindicato recuerda que el pasado 22 de julio se firmó el Acuerdo Confederal entre UGT, CCOO, el Ministerio de Hacienda, Sepi y Correos, y que el 28 de julio fue aprobado por la Sepi el nuevo Plan Estratégico del grupo.
Correos tiene que dar a conocer el contenido del plan a partir de este mes de septiembre, y los sindicatos velan armas.
Del nuevo plan, «no hacemos valoración porque nadie nos lo ha enseñado y esperamos que en septiembre se transforme en carne y hueso para opinar», señala UGT.
«Se supone que entre las medidas de contención de gasto para dar respuesta a la gravedad de la situación heredada está el gasto en contratación», indica. «Pero este es un tema del que ya hemos advertido y lo estamos haciendo a nivel general todos los sindicatos en todo el país», añade.
La empresa presidida por Pedro Saura admite en sus últimas cuentas anuales que en 2025 podría estar en causa de disolución, tras sumar pérdidas millonarias año tras año (120 millones en 2023, 217 millones en 2022). El sindicato liderado por Pepe Álvarez concluye que Correos «está en una situación económica muy delicada».
En la situación actual de Correos, subraya UGT, «una empresa privada estaría cerca de la quiebra«.
El grupo, que a consultas de este diario se ha remitido al comunicado oficial sobre el nuevo Plan Estratégico, terminó 2023 con un fondo de maniobra negativo por importe de 191 millones de euros (49,2 millones en 2022). Los fondos propios se redujeron hasta los 514 millones de euros (633 millones un año antes), siendo el capital social de 612 millones y el patrimonio neto de 724 millones (851 millones en 2022).
El sindicato UGT asegura que durante el verano se han limitado las contrataciones llevando al límite a la plantilla.
«O se corrige de inmediato está forma de actuar, o hablar de futuro en Correos será una quimera«, sostiene. «Los sindicatos no detentamos el poder político ni de gestión en las decisiones que hay que tomar para sacar a Correos del atolladero en el que está», advierte.
«Hay demasiados enemigos (fuera, de un lado, del otro e incluso de dentro) interesados y esperando el descabello de Correos aprovechando una debilidad actual de la que los trabajadores y sus sindicatos somos los últimos responsables», lamenta UGT. Que la situación del grupo sea crítica, advierte, «no significa que aceptemos cualquier trágala en nombre del rescate necesario«.
Correos afronta además litigios millonarios que pueden socavar aun más su capacidad de reacción ante las millonarias pérdidas registradas.
El grupo está pendiente de que próximamente se de a conocer la sentencia del caso Unipost, que podría suponer una indemnización que tendría que pagar la compañía pública de más de 300 millones de euros.
Además, como publicó la pasada semana Economía Digital, la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia insiste en que el grupo incumple la Ley Postal y está llevando a cabo una contabilidad que tendrá que corregir. Las consecuencias de esas advertencias podrían traducirse en demandas millonarias por parte de los operadores postales privados contra Correos.