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Las ayudas que puedes recibir junto con tu pensión de incapacidad permanente (y nadie te lo ha contado)
La prestación cubre la pérdida de ingresos que sufre un trabajador cuando por enfermedad o accidente ve reducida o anulada su capacidad laboral
Entre las prestaciones económicas que el Estado pone a disposición de la ciudadanía, se encuentra la pensión de incapacidad permanente. Su objetivo es cubrir la pérdida de ingresos que sufre un trabajador cuando por enfermedad o accidente ve reducida o anulada su capacidad laboral.
Todas las personas que cobren está tipología de pensión tienen reconocida automáticamente una discapacidad de al menos el 33%. En cuanto a la cuantía que recibe el beneficiario, la determina el grado de incapacidad permanente: parcial, total, absoluta o gran invalidez.
Así, a los beneficiarios con una situación más leve les corresponde una indemnización de 24 mensualidades de la base reguladora que sirve para el cálculo de la incapacidad temporal. En cambio, los trabajadores con un grado más grave pueden llegar a cobrar el 100% de la base reguladora más un complemento.
También hay que tener en cuenta que las pensiones por incapacidad permanente se ingresan en 14 pagas mensuales con dos extraordinarias. En cambio, las que provienen por un accidente laboral o una enfermedad profesional se pagan en 12 mensualidades, pues las extraordinarias de junio y noviembre se prorratean a lo largo del año.
Pensión compatible con otras ayudas
La pensión de incapacidad permanente se puede recibir a la vez que otras prestaciones, como el subsidio para mayores de 52 y 45 años. Unas ayudas gestionadas por el Servicio Público de Empleo Estatal y que se pueden cobrar hasta la jubilación. Su objetivo es suplir los ingresos de estas personas que están en situación de desempleo.
Asimismo, se puede complementar con la Renta Activa de Inserción, una prestación de 480 euros mensuales dirigida a mayores de 45 años que se encuentren en una situación de desempleo de larga duración, emigrantes retornados, víctimas de violencia de género o personas con discapacidad superior al 33%. Tiene la finalidad de aumentar las oportunidades de reintegración al mercado laboral y se puede recibir durante un máximo de 11 meses.
La pensión de incapacidad también es compatible con el complemento para reducir la brecha de género, una prestación que pueden solicitar tanto hombres como mujeres que hayan visto afectada su carrera laboral por la crianza de los hijos.