El Supremo confirma que la instalación de ‘mobile homes’ requiere de licencia urbanística
El Tribunal Supremo rechaza las alegaciones de asemejar las mobile homes a los remolques
El Tribunal Supremo ha creado jurisprudencia. La instalación de mobile homes requiere de licencia urbanística por parecerse más a una casa prefabricada que a un remolque.
La sentencia del Tribunal señala que no son remolques, ni siquiera dentro de la subcategoría específica de remolque habitable. Un remolque es un «vehículo no autopropulsado diseñado y concebido para ser remolcado por un vehículo de motor», y el diseño de las «mobile homes» es incompatible con su utilización habitual como vehículo remolcable, aunque puntualmente puedan serlo.
También afirma que hay que atender a su destino preferente, y destaca que han sido ideadas y creadas para proporcionar casa, hogar, a una persona o grupo de personas, bien de forma temporal o bien de forma permanente, sin perjuicio de que conserven una vez instaladas ciertas aptitudes para la movilidad.
El Supremo delimita el concepto de «resort» ante la voluntad de la recurrente, titular del camping, de dotar a las parcelas de los servicios de agua, electricidad y desagüe para colocar sobre ellas, «mobile homes» y bungalows.
Sobre ello, la sentencia expone que, la transformación pretendida con la colocación de las «mobile homes» en unos terrenos de suelo no urbanizable a los que se las ha dotado de los servicios de agua, electricidad y desagüe, exige autorización urbanística; sin que en ningún caso dicha transformación pueda quedar amparada, como pretende la parte recurrente, en la licencia de actividad de camping.
Las «mobile home» quedan por ello sujetas a las normas urbanísticas aplicables. En cuanto a su instalación en los campings, asegura la sentencia que no basta con la licencia de actividad de este establecimiento, ya que dicha licencia ninguna incidencia tiene en relación al control urbanístico de los usos del suelo.
Para la Sala, la sujeción a licencia urbanística no resulta contraria a la Directiva de Servicios ni a la Ley 17/2009, sobre el libre acceso a las actividades de servicio y su ejercicio. Estas normas son aplicables a los requisitos que afecten al acceso a una actividad o a su ejercicio, pero no a los requisitos que derivan de las normas de ordenación del territorio y urbanismo, en la medida en que no regulan específicamente a la actividad del servicio.
Al contrario, incluso la Directiva expresamente señala que la protección del entorno urbano constituye una razón imperiosa de interés general que permite justificar la aplicación de regímenes de autorización y otras restricciones.
Las ‘mobile homes’ como alternativa a la vivienda
Ante la persistente crisis de vivienda, los campings han emergido como una solución temporal y económica para muchas familias y personas solteras. Con el incremento en los precios de alquiler y compra de propiedades, así como la escasez de viviendas asequibles en las grandes ciudades, vivir en mobile homes ofrece una opción viable para quienes buscan reducir costes.
En España, donde los campings son una tradición arraigada, muchos han adaptado estas áreas recreativas en espacios residenciales semipermanentes. En comunidades autónomas costeras o rurales, como Cataluña o Andalucía, es común encontrar personas que alquilan parcelas durante todo el año, aprovechando tarifas reducidas.
Los habitantes de estos espacios destacan la sensación de comunidad y la oportunidad de vivir en entornos naturales. Sin embargo, advierten de desafíos como la falta de privacidad y la incertidumbre legal, ya que muchos campings no están diseñados para residencia permanente. Además, la llegada del invierno puede ser particularmente dura debido al aislamiento y las bajas temperaturas.
Expertos en vivienda señalan que esta tendencia refleja la falta de políticas públicas eficaces para abordar la crisis habitacional. Mientras algunos ven los campings como una solución temporal, otros temen que este fenómeno pueda perpetuarse si no se abordan las raíces del problema.