El stock de vivienda ‘desaparece’ en Barcelona, Madrid y Sevilla
A nivel nacional, se ha reducido en un 56% el stock de alquiler desde diciembre de 2020, provocando un encarecimiento del 30% en los precios
Archivo – Un cartel de alquiler de vivienda.
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Barcelona, Madrid y Sevilla han experimentado una drástica reducción en su oferta de vivienda en los últimos cinco años, con desplomes del 84%, 71% y 73% respectivamente, según los últimos datos del portal inmobiliario Idealista.
Este fenómeno, que también afecta a otras capitales como Palma (-73%) o Las Palmas de Gran Canaria (-70%), ha reducido en un 56% el stock de alquiler en España desde diciembre de 2020, año de la pandemia, provocando un encarecimiento del 30% en los precios a nivel nacional. Con caídas por debajo del 70% se encuentran San Sebastián, Málaga, Valencia y Bilbao.
La Comunitat Valenciana lidera en precio
Mientras la oferta de vivienda se ha reducido, los precios han seguido una tendencia alcista en todas las capitales analizadas. Valencia lidera el ranking de encarecimiento con un aumento del 74% en el precio medio del alquiler respecto a febrero de 2025, seguida de Barcelona (+62%) y Alicante (+60%), también de la Comunitat Valenciana. Málaga (+55%), Segovia (+54%) y Palma (+53%) también han registrado incrementos notables.
En contraste, las menores subidas se han dado en Lleida (+15%), Melilla (+17%), Bilbao (+19%) y Vitoria (+19%). La escasez de oferta ha hecho que en ciudades como Zamora, Teruel, Lugo, Huesca y Ceuta no haya suficiente muestra para calcular el precio medio del alquiler en febrero de 2025, cuando sí era posible hacerlo en 2020.
Estos datos reflejan cómo el acceso a la vivienda se ha convertido en un problema estructural en España, con políticas públicas que, según expertos del sector, han desincentivado la oferta sin lograr frenar la escalada de precios.
En el caso valenciano, la administración autonómica de Carlos Mazón ya ha puesto en marcha el Plan Vive y anunció la construcción de un total de 1.300 inmuebles que se destinarán a alquiler asequible, con dos de sus ciudades entre las que más han incrementado el precio del alquiler.
Un parque insuficiente
Pese a la creciente dificultad, el parque de vivienda asequible en España ha aumentado hasta el 3,4% del total, según un estudio de Alquiler Seguro. Sin embargo, este incremento responde principalmente a la incorporación de promociones privadas gestionadas por entidades sociales y organizaciones del tercer sector, lo que cuestiona el verdadero peso de la vivienda social pública en el país.
España sigue rezagada en inversión en vivienda social en comparación con Europa. Según los datos del ‘Boletín Social 2024’, el país invirtió una media de 34 euros por habitante en asistencia habitacional entre 2007 y 2021, muy por debajo de los 160 euros de media en el resto de la Unión Europea.
Silencio sobre las promesas del Gobierno
La falta de impacto tangible para paliar esta situación quedó en evidencia durante el foro ‘Vivienda, quinto pilar del Estado del Bienestar’, celebrado en enero.
A pesar de la urgencia del problema, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no hizo referencia a las 184.000 viviendas del Plan de Vivienda en Alquiler Asequible (PVAA) anunciadas para esta legislatura ni a las más de 81.000 en desarrollo que mencionó el pasado 30 de septiembre. Tampoco la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, mencionó estos compromisos en su intervención.
Las únicas cifras a las que aludió Sánchez fueron las 30.000 viviendas de la Sareb que se incorporarán a la nueva Empresa Pública de Vivienda, dejando sin respuesta las dudas sobre el calendario y la ejecución del resto de planes prometidos.
En febrero, la ministra Rodríguez afirmó que casi la mitad (45,6%) de las 1.626 viviendas públicas permanentes que el Gobierno ha anunciado que licitará este trimestre estarán situadas en Islas Baleares y la Comunidad Valenciana, concretamente, estas dos comunidades concentrarán 742 viviendas del total.
Un mercado tensionado y sin soluciones inmediatas
La combinación de una oferta en caída libre y la falta de medidas efectivas para aumentar el parque habitacional disponible mantiene tensionado el mercado inmobiliario en España. Mientras en algunas capitales como Cuenca (+149%), Ceuta (+81%) o Segovia (+48%) la oferta de alquiler ha crecido, la tendencia mayoritaria es la contraria, con fuertes descensos en las grandes urbes.
A este escenario se suma la incertidumbre regulatoria, que ha llevado a un tercio de los propietarios a retirar sus viviendas del mercado del alquiler, según la información de la Federación Nacional de Asociaciones inmobiliarias (FAI).
