6 formas de comprar una casa: No todo son hipotecas

Olvídate de acudir a los bancos y prueba una de estas seis maneras que os traemos para comprar una casa.

Comprar una casa

El alquiler con opción a compra es una de las alternativas más conocidas para quienes no disponen de ahorros suficientes para una entrada.

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Adquirir una casa en propiedad se ha convertido en todo un reto en los últimos años.  

Pero hay fórmulas que pueden ayudarte sin recurrir a una hipoteca bancaria. 

¿Cuáles son estas maneras? 

Exactamente hay seis maneras con las que puedes comprar una casa sin tener que recurrir a una entidad bancaria. 

1. Alquiler con opción a compra 

El alquiler con opción a compra es una de las alternativas más conocidas para quienes no disponen de ahorros suficientes para una entrada.  

Este modelo te permite alquilar la vivienda durante un tiempo determinado con la posibilidad de comprarla posteriormente. 

El precio de compra se pacta al inicio del contrato, congelándolo frente a las fluctuaciones del mercado.  

Además, es común que las cuotas del alquiler se descuenten del precio final de la vivienda, lo que ayuda a reducir el importe a financiar en el futuro. 

2. Préstamo de dinero entre particulares 

El préstamo entre amigos o familiares es una fórmula bastante corriente.  

Permite obtener liquidez rápidamente y está exento de impuestos. 

Es recomendable redactar un contrato que especifique el plazo de devolución y si se aplicarán intereses.  

En caso de que el importe sea alto, los expertos aconsejan respaldar el préstamo con la propiedad inmobiliaria, lo que implica acudir al notario. 

3. Compraventa con pago aplazado 

La compraventa con pago aplazado es otra opción para adquirir una vivienda.  

En este caso, el comprador paga el precio de la vivienda en plazos, generalmente a medida que recibe ingresos, como la venta de otro inmueble, una herencia o una indemnización. 

Eso sí, esta opción requiere una planificación financiera sólida, pero permite a los compradores evitar esa carga inicial de una hipoteca y reducir su deuda total. 

4. Donación de dinero de familiares 

Hay familiares que lo dan todo sin pedir nada. Es el caso más común entre padres e hijos.  

La donación de dinero por parte de familiares es una de las formas más comunes de ayudar a los jóvenes cuando estos quieren adquirir una vivienda. 

Las ventajas fiscales varían según la comunidad autónoma, lo que hace que esta opción sea mucho más atractiva en algunas regiones que en otras.

En la mayoría de los casos, la donación se realiza a cuenta de la herencia para evitar perjudicar al resto de los herederos. 

5. Permuta de viviendas 

La permuta de viviendas es una alternativa menos conocida popularmente pero muy eficaz en ciertas situaciones.  

Este mecanismo consiste en el intercambio de inmuebles entre dos propietarios sin que medie dinero, o con un pequeño acuerdo económico en caso de que las propiedades no posean el mismo valor.  

La principal ventaja de este método es evitar la necesidad de obtener financiación y permite cambiar de casa sin vender la vivienda actual.  

6. Seguro de caución 

El seguro de caución permite a los compradores evitar una hipoteca tradicional al solicitar un préstamo no hipotecario garantizado por un seguro de caución.  

Si el comprador no puede pagar las cuotas del préstamo, la aseguradora cubrirá la deuda y reclamará el importe al cliente. 

Este método puede ser adecuado para quienes tienen dificultades para obtener una hipoteca, pero si tiene un capital suficiente para asegurar el préstamo. 

Desde el alquiler con opción a compra hasta la permuta de viviendas, es posible explorar estas alternativas que se ajusten a tu capacidad de ahorro y al entorno económico actual.  

Lo importante es analizar cada opción y determinar cuál es la tuya

Si quiere saber cuáles son las viviendas con el alquiler más barato de Madrid, pincha aquí

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