Del “Plan de acción para la democracia” al Granma y el Pravda 

Desde La Moncloa no quieren defender el pluralismo si no que haya infinidad de terminales que apunten, todas, en la misma dirección

El Gobierno presento el denominado “Plan de acción para la democracia para reforzar la transparencia, el pluralismo y el derecho a la información”. Lo mejor que se puede decir del mismo es que, posiblemente, jamás verá la luz.  

El Gobierno es un experto en comunicar cosas que parece que van a suceder, pero luego no pasan. Es una suerte que casi todo lo que anuncia La Moncloa no se materialice porque en caso contrario nuestro país estaría muchísimo peor.  

“El plan de acción para la democracia” es un eufemismo de “Sistema de coacción personal, profesional y económica para silenciar a los medios y periodistas empeñados en no postrarse ante el poder”

El Gobierno no busca que impere la verdad si no el pensamiento único. Desde La Moncloa no quieren defender el pluralismo si no que haya infinidad de terminales que apunten, todas, en la misma dirección.  

Conscientes de que crear una línea de pensamiento único es casi un imposible y que la posición totalitaria de exclusividad impuesta de la que goza el Granma cubano o tuvo el Pravda soviético es imposible, la propuesta socialista es parecida a la del socialismo real. Al igual que la revolución marxista y su plasmación rusa o china era un paso intermedio hasta el comunismo perfecto, el sanchismo nos propone una transición mediática basada en ahogar económicamente a los medios no genuflexos, señalar a los periodistas críticos y mimar a los grupos de comunicación que navegan en la sumisión sanchista.  

¿Esta era transitoria como se materializa? Como es demasiado escandaloso entrar en los medios como el capitán Renault en el café de Rick en Casablanca al grito de: “¡ciérrese este local, es escandaloso, aquí se juega¡” mientras recogía sus propias ganancias de la mesa de la ruleta, Urtasun, Bolaños y Sánchez han ideado una estrategia basada en retirar acreditaciones, desacreditar medios para que se le cierren puertas y dejar de invertir publicidad en ellos para volcarla toda en los aduladores sin límite. ¡A más adulación, más inversión¡  

El ministro de cultura ha dicho que se excluía de tan sagaz plan los medios escritos en lenguas regionales. Eso me lleva a una duda: ¿Qué pasa cuando un medio escrito en vasco o catalán es pelota con Illa, Chivite o Pradales pero discrepante con Sánchez? ¿Cuál es el nivel de crítica tolerable por el presidente para no perder el favor de las campañas institucionales públicas? Siendo Sánchez y con lo fina que tiene la piel, la crítica aceptable es ninguna.    

Hoy todos sabemos que solo por elegir ir de invitado a La Revuelta de Broncano o a El Hormiguero de Motos puedes ser señalado en nombre del “Plan de acción para la democracia”

Sánchez intentará que la transitoriedad se convierta en definitiva, su proyecto es infalible. Muchos de los grandes anunciantes de este país son públicos y dependen de una decisión de Sánchez: RENFE, Correos, AENA, Loterías, Agencia Tributaria, DGT, las CC.AA socialistas y independentistas están en la lista de grandes anunciantes. Mueven millones qué con un guiño, casi imperceptible del ojo del presidente, se mueven de unos medios a otros.  

Pero el plan tiene aspectos más sutiles. Hoy todos sabemos que solo por elegir ir de invitado a La Revuelta de Broncano o a El Hormiguero de Motos puedes ser señalado en nombre del “Plan de acción para la democracia”. También se analizará con lupa que empresas invierten en ciertos medios para luego poder susurrarles al odio que esas inversiones no son adecuadas si se quiere ser adjudicatario de tal o cual concurso público.  

Dijo Reagan que lo peor que podía sucederle a alguien es que le dijeran: “soy el Gobierno y estoy aquí para salvarte”. “El plan de acción para la democracia” no se ha ideado para mejorar la calidad de información que llega a la sociedad si no para que a dicha sociedad solo le llegue la información que Sánchez desee.  

La única verdad revelada desde el sanchismo es la que difunde el diputado socialista de la asamblea de Madrid: “tienen envidia a Sánchez porque esté buenísimo”. Cualquier otra información será objeto de persecución.