Caldea inicia la transformación de spa a resort con la reforma de la gran laguna y actualiza la marca
El proyecto contempla una revitalización integral de todo el edificio, la construcción de un hotel y la redefinición de la estrategia de marca
Presentación de Caldea. Foto: Caldea.
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Caldea, el centro de ocio termal de Andorra, ha iniciado una etapa de transformación que tiene como objetivo convertirla en uno de los resorts termales más importantes del sur de Europa, un proyecto que coincide con la celebración de su 30.º cumpleaños.
El proyecto contempla dos grandes ejes. Por un lado, la reforma y modernización de los espacios desde una perspectiva minimalista y moderna y la construcción de un hotel de 4 estrellas en la icónica Torre y, por la otra, la actualización de la estrategia de marca.
La gran laguna es el icono principal de esta transformación y la primera zona donde se ha actuado, con una actualización de la estética de esta instalación que respeta su morfología y las icónicas tazas de hidromasaje. El espacio, que abrirá en agosto, estrenará un nuevo look más minimalista, con revestimientos y pavimentos blancos que transmitirán simplicidad, proximidad y elegancia para disfrutar de los pequeños placeres en un entorno que invitará a la evasión.
Las actuaciones seguirán los próximos tres años con la construcción de un nuevo puente de acceso por el río que abrirá el edificio en la ciudad. También se reformará la laguna exterior convirtiéndola en un lago y se modernizarán otras zonas del edificio. Finalmente, en 2026 se inaugurará un hotel en la Torre.
Así lo ha presentado Miguel Pedregal, director general de Caldea, en un acto que ha tenido lugar en los Cines Illa Carlemany, en qué Pedregal ha explicado que “la transformación de Caldea en un resort es un camino natural en la evolución de los spas y responde a la insistente demanda de nuestros clientes para poderse alojar en el mismo edificio”. Caldea estima que con las actuaciones previstas y la incorporación del nuevo hotel obtendrá un crecimiento del 40% de su facturación de cara al 2030 con unos ingresos de 30 millones de euros.
Nueva identidad visual
El segundo eje de la transformación ha consistido a reformular la estrategia de marca, fijar un nuevo propósito más ambicioso y el lanzamiento de una nueva identidad visual. La nueva Caldea tiene como visión: «Influir la mejor versión de Andorra y hacerla accesible a todo el mundo a través de momentos inolvidables de buena vida. Este nuevo propósito convierte definitivamente a Caldea en marca embajadora de país y eleva la promesa, que ahora se propone entregar momentos de buena vida a todo el mundo», indicaron desde el centro termal.
En paralelo se ha actualizado la identidad visual y Caldea estrena logotipo, un nuevo color corporativo y varios colores secundarios, una tipografía personalizada y una batería de recursos gráficos como la ilustración, que enriquecerán la comunicación en los diferentes canales. El nuevo logotipo, que continúa teniendo una forma circular, es más flexible y moderno y refleja el objetivo de garantizar la excelencia con una experiencia de 360 grados llena de instantes de quietud absoluta y otros momentos más lúdicos y vibrantes. «El nuevo logotipo, como el agua, simboliza a su vez la fluidez de una experiencia de bienestar que se adapta a todos los usuarios», señalaron.
