Rueda rechaza una financiación singular para Galicia y se proclama jefe de la oposición a Sánchez
Ana Pontón le reprocha que el modelo de financiación del PP cuesta a Galicia 1.000 millones al año y le pregunta por qué el PP defiende un tratamiento singular para Aragón
Alfonso Rueda y Ana Pontón confrontaron modelos por la financiación autonómica, mostrando profundas discrepancias de enfoque. El presidente de la Xunta defendió el concepto de «multilateralidad», mientras que la líder de la oposición le instó a conseguir una financiación justa para Galicia, pues asegura que está discriminada por el modelo que avaló el PP.
Como suele suceder en los debates que pasan por Madrid, el dirigente autonómico acusó a la líder de la oposición de ser una «muleta» del PSOE, y la portavoz nacional del BNG señaló a Rueda por seguir las órdenes de Génova aunque perjudiquen a los gallegos.
En el cruce de intervenciones, el líder del PPdeG se proclamó «jefe de la oposición de Galicia al Gobierno», sublimando su rol como jefe de filas de los populares gallegos y como presidente de la Xunta.
Los jefes de la oposición
«Gánese su salario», reclamó Ana Pontón al término de unas de sus intervenciones en la sesión de control con la que se ha reiniciado el pleno ordinario en el Pazo do Hórreo, donde la nacionalista, a raíz de una pregunta sobre la reforma del modelo de financiación autonómico, ha acusado a Rueda de referirse al acuerdo de investidura entre BNG y PSOE en el Estado «cada vez que se habla de una cosa que decide en Madrid», lo que ve una muestra de que el presidente gallego «no consigue nada para Galicia» y actúa como un «jefe de la oposición» al Bloque en el Parlamento gallego en lugar de ejercer como máximo responsable del Gobierno autonómico.
«Soy el jefe de la oposición de Galicia frente al Gobierno central. A mucha honra«, ha replicado Rueda, quien ha afeado a los nacionalistas gallegos que sean «muy bravos» en la política autonómica y «callen» cuando los socialistas «incumplen» los acuerdos de investidura con los que prestó su apoyo a Pedro Sánchez en las dos últimas legislaturas el Bloque, a los que ha calificado de «grandes timados» de la política. «La pena es que a quien se tima es a Galicia», ha apostillado.
Igualdad y singularidad
El careo quincenal entre Pontón y Rueda estuvo centrado, en esta ocasión, en el debate sobre el modelo de financiación, con la nacionalista defendiendo la necesidad de un tratamiento «singular, propio o como quiera llamarle» para Galicia que rompa con la concepción «firmada» hace 14 años por el entonces presidente gallego y hoy líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, que «hace perder 1.000 millones anuales» a la Comunidad gallega.
Pero Rueda ha rechazado que esa sea la postura que considera oportuno defender porque va en contra de «la igualdad» entre los territorios y, además, está convencido de que el Partido Socialista no va a hacer tal oferta a Galicia porque «a quien le interesa» plantearlo es al «independentismo catalán» como contrapartida para hacer que Salvador Illa sea el próximo president de la Generalitat.
«Son los que le interesan, ustedes son una muleta», ha espetado Rueda a Pontón, frente a la que defendido que la Xunta apuesta por una negociación «multilateral» en la que se prime la igualdad de las comunidades y la cobertura de los servicios públicos en función de las características del territorio, en Galicia, marcadas por la dispersión poblacional y el envejecimiento. «Si nos llaman para repartir las migajas después de ese festín singular que se quieren dar unos, que no cuenten con nosotros«, ha añadido.
La fuga de 14.000 millones
Para Pontón, la «multilateralidad» por la que apuesta Rueda para negociar el modelo de financiación fue el origen del modelo que provoca que, desde 2009, Galicia «haya perdido 14.000 millones de euros», algo que «no lo dice el BNG», sino que está reflejado en un informe del Consello de Contas que revela que Galicia «pierde, y mucho» con un sistema «discriminatorio» que tiene como «cómplice» a un PP que «no movió un dedo para solucionarlo» en la última década.
En este sentido, la nacionalista se ha preguntado por qué ahora Feijóo «asume» desde su responsabilidad en el PP estatal «el criterio de población» para el sistema de financiación «que combatía» cuando era presidente de la Xunta, o por qué el PP «defendía» hace una década un tratamiento «singular» para Cataluña o la hace ahora para Aragón pero lo «descarta» para Galicia. Todo, mientras Rueda, «el líder del galleguismo», «receta» un modelo que hace que cada gallego «reciba 391 euros menos de lo que corresponde».
La declaración de Santiago
«Vamos a hacer justo lo contrario de lo que ustedes apoyan. Huir de particularidades y rechazar una política que para Galicia es letal y demoledora», ha aseverado Rueda, que ha incidido en que la financiación de los servicios públicos según el coste de su prestación en cada territorio es el criterio que defenderá Galicia, en la línea de lo aprobado en la bautizada como «declaración de Santiago» que reunió en 2021 en la capital gallega a los presidentes de Galicia, Asturias, Cantabria, La Rioja, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y Castilla y León.
Así, el líder de los populares gallegos ha instado a Pontón a sumar al BNG a estas coordenadas y abandone así posturas de «terceras vías» que ponen en cuestión la «igualdad» entre los territorios del Estado «leales con la Constitución«, ya que considera que «pedir trozos de tarta» al Gobierno de Pedro Sánchez finalizará con Galicia recibiendo «migajas» porque, para Rueda, el objetivo de los socialistas en este debate es lograr el apoyo del independentismo de cara a atar el gobierno catalán.
El papel de Galicia y el del PP
«Su respuesta es el retrato de su incapacidad política hasta un límite que creía que no vería en este Parlamento», ha espetado Pontón, que ha censurado que Rueda, después de que instase al BNG a reclamar ante Sánchez que cumpliese «un poco» del acuerdo de investidura, le pidiese que sea ella quien haga su «trabajo» de negociar un trato «justo» para Galicia en el sistema de financiación.
En este sentido, ha exhortado al mandatario autonómico a marcar perfil propio y alejarse de «lo que le marcan desde Génova». «Empiece a tomarse en serio lo que significa ser presidente. No puede ser que a día de hoy no sepamos lo que defiende y venga a una sesión de control a pedir al BNG que haga su trabajo. Gánese su salario«, ha concluido la líder frentista su segunda intervención.