Rueda trocea Energía e Innovación, pero mantiene la planificación industrial en manos de Lorenzana
La Consellería de Economía controlará los centros tecnológicos, el suelo industrial, los drones de Rozas y el desarrollo de las renovables, aunque su tramitación y declaración de utilidad pública pasará a manos de Medio Ambiente
La nueva estructura de la Xunta divide las competencias que estaban agrupadas en la Consellería de Economía y en la Axencia Galega de Innovación entre varios departamentos, pero respetando los poderes de María Jesús Lorenzana respecto al desarrollo industrial de Galicia.
La cartera en la que reemplazó a Francisco Conde mantendrá responsabilidades tanto en la planificación de los proyectos renovables como en el impulso a las estrategias de innovación de las empresas, a pesar de que parte de esas áreas pasen ahora a Medio Ambiente y a Educación.
Este cambio será especialmente relevante en el ámbito energético, como ya había avanzado el presidente de la Xunta, ya que será el departamento de Ángeles Vázquez el que se encargue de toda la tramitación de renovables y también de la declaración de interés público de las iniciativas, lo que exigirá de un esfuerzo de coordinación entre los equipos de las conselleiras.
Autorizo yo y planificas tú
El Diario Oficial de Galicia, que este miércoles detalla la estructura orgánica del Gobierno gallego, detalla que Medio Ambiente asumirá las competencias y funciones de tramitación y otorgamiento de las autorizaciones de las instalaciones de energía eólica terrestre, energía solar fotovoltaica y energía hidroeléctrica que sean de responsabilidad autonómica, así como de sus instalaciones de conexión.
El documento precisa que Ángeles Vázquez asumirá las competencias de autorización administrativa de las instalaciones de los parques eólicos y de sus instalaciones de conexión, así como la declaración de utilidad pública, pero la Consellería de Economía e Industria «ejercerá las competencias de planificación del aprovechamiento eólico previstas en la ley». Lorenzana, por tanto, mantendrá el bastón de mando en la planificación industrial de las renovables y de su Consellería seguirán colgando la dirección xeral de Enerxía e Minas y el Inega.
Rueda le asigna también las funciones de seguimiento del cumplimiento de las declaraciones de impacto ambiental y de los informes de impacto ambiental correspondientes a las instalaciones previstas.
Innovación industrial y universitaria
Algo similar ocurre en las políticas de innovación. La Axencia Galega de Innovación estará ahora bajo la tutela de Educación, en un aparente intento de vincular su tarea a la investigación en el ámbito universitario. Sin embargo, Economía mantendrá lo relacionado con el desarrollo tecnológico y el I+D del tejido productivo.
«La adscripción de la Axencia Galega de Innovación a la Consellería de Educación se entenderá sin prejuicio de las competencias y funciones que pueda asumir la Consellería de Economía, de acuerdo con lo que se establezca en su decreto de estructura orgánica, en la materia de promoción industrial, desarrollo tecnológico e innovación de los sectores productivos, gestión de infraestructuras tecnológicas, apoyo al crecimiento de nuevas empresas de base tecnológica y asesoramiento e información en la materia de propiedad industrial», dice el DOG.
La reorganización, por tanto, parece afectar más a los entes adscritos, que quedan fragmentados, que a las propias competencias de la conselleira, que podrá asumir, además, los distintos centros tecnológicos de la Xunta, en particular, la gestión del CIS Galicia-Centro de Innovación e Servizos para a Tecnoloxía e o Deseño.
En manos de Lorenzana estará también el aeródromo de Rozas, con su plan de desarrollo de drones; y el suelo industrial agrupado en Xestur.