Perte de la industria agroalimentaria: Galicia, tercera comunidad que recibe más fondos
El Ministerio de Industria adjudica 183 millones a 233 empresas para fortalecer el sector agroalimentario; del total, Galicia contará con 14 millones, solo por detrás de Cataluña y Valencia
Entre préstamo y subvención propuesta, Galicia recibirá un total de 14 millones de euros para el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) de la agroalimentación, solo por detrás de Cataluña y Valencia, que, respectivamente, han logrado 53,4 y 37,6 millones de euros. A Galicia, en cuanto a importe de los fondos, le siguen Andalucía, Aragón y Murcia. En total, el Ministerio de Industria y Turismo ha adjudicado 183,6 millones de euros a 292 proyectos de 233 empresas para el fortalecimiento industrial del sector agroalimentario.
Galicia recibe el grueso de los fondos, unos 13,4 millones de euros, en forma de subvenciones y no en créditos. Las ayudas se corresponden con la resolución definitiva del Perte del sector agroalimentario en su eje 1, que incluye actuaciones de apoyo a la industria agroalimentaria. De dichas ayudas totales, 163,5 millones de euros lo son en forma de subvenciones y 20,1 millones en forma de préstamos, ha precisado en un comunicado.
“Para mejorar la competitividad y sostenibilidad de la industria agroalimentaria hace falta invertir en investigación e innovación, tanto en nuevos alimentos y procesos, como en la mejora de la seguridad alimentaria, y este Perte ayudará a conseguirlo”, ha asegurado el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu.
Apoyo al rural
El ministro ha recordado que la industria alimentaria está localizada en las zonas rurales, y más del 70% de la producción agrícola y ganadera se transforma a través de ellas. “Por tanto, si la industria alimentaria está modernizada y tiene futuro, el sector primario, el sector rural, también lo tendrá”, ha defendido.
El Perte agroalimentario está formado por el eje 1, de apoyo a la industria alimentaria; el 2, de digitalización del sector; y el 3, de i+D+i en el ámbito agroalimentario; cada uno de ellos gestionado por un ministerio. Está previsto que genere un impacto en la economía de 3.000 millones y una creación neta de 16.000 empleos.