Los Next Generation se olvidan de la paridad: aplastante mayoría masculina en los empleos de los Perte

España fue uno de los primeros países en acogerse al plan de recuperación de la Unión Europea y uno de los principales receptores de estos fondos con acceso, aproximadamente, a 77.000 millones en transferencias y hasta 84.000 en préstamos. La Comisión Europea exigió a los Estados miembros que integraran la igualdad de género dentro de sus Planes de Acción Nacional (PAN) pero ¿realmente se está cumpliendo?. Un reciente estudio de los profesores de la Universidade de Santiago de Compostela María Bastida, Miguel Ángel Vázquez Taín y Marisa del Río Araújo prevé que los hombres ocupen una mayoría sustancial de los puestos de trabajo creados por los Perte, con una proporción del empleo del 72%.    

Bajo el título Abordar la brecha oculta de género: revelar la discriminación en las estrategias de recuperación de la UE el estudio realiza un análisis de las disparidades de género en la ejecución de estos mecanismos. “Las medidas de recuperación dieron prioridad a sectores tradicionalmente dominados por hombres, descuidando aquellos que empleaban a mujeres, que se vieron gravemente afectados por la pandemia”. A ello habría que sumar que el programa Next Generation “careció de apoyo específico para sectores con alto empleo femenino como la salud y los cuidados, cruciales durante la respuesta a la pandemia”.

Según los datos del estudio, existe una notable brecha de género en los diferentes sectores sobre los que se erigen los Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte). Así, por ejemplo, el de vehículos eléctricos y conectados y el de la descarbonización industrial muestran una importante subrepresentación de las mujeres, con menos del 30% del empleo proyectado. Un balance más equilibrado presentan sectores como la economía agroalimentaria y las nuevas lenguas, que presentan una distribución de género más equilibrada, aunque los hombres mantienen también en ellos una posición predominante. 

En sectores estratégicos como la descarbonización industrial o los vehículos eléctricos y conectados “el empleo de las mujeres está profundamente por detrás del de los hombres, en tasas superiores al 150%”. Aunque con mejores resultados, el agroalimentario y la nueva economía lingüística, también muestra una brecha de género “significativa” con unas tasas de empleo para las mujeres “que se quedan rezagadas” en un 71,22% y un 27,48%, respectivamente. “Estos datos subrayan el alcance de la desigualdad de género en el mercado laboral dentro de estas áreas objetivo de la recuperación y transformación económica”, explica el estudio.

Distribución por género de los nuevos empleos

El análisis pondera cada proyecto estratégico de recuperación según su importancia en la participación de los fondos asignados, algo que permite “estimar una visión más matizada de la distribución de género en el empleo que se espera que generen estas iniciativas”. Ese prisma, no sólo refleja el potencial de empleo directo de cada Perte sino que “también tiene en cuenta la escala de la inversión, proporcionando una representación más precisa de los resultados esperados en el mercado laboral del plan de estímulo económico de España”.

La estimación es que las mujeres lleguen a ocupar solo un 28% de los nuevos puestos de empleo creados con los Perte, una “sorprendente disparidad que pone de relieve un desequilibrio de género que podría verse exacerbado por la actual asignación de fondos entre los diversos sectores estratégicos”.

El estudio hace referencia a la estimación realizada recientemente por el Banco de España sobre el efecto que tendría la implementación del Plan Nacional de Actuación español a medio plazo. En concreto la autoridad monetaria considera que la ejecución de los Next Generation en el país tendrá un impacto directo sobre el nivel del PIB del 1,15% de media anual en un un horizonte de cinco años, que podría elevarse al 1,75% al tener en cuenta los «efectos de arrastre» entre sectores. 

Tomando como referencia la distribución de género actual dentro de los sectores, el análisis apunta que la implementación de este plan daría como resultado un crecimiento del empleo sesgado hacia los hombres. “Si no se toman medidas correctoras, el 58,58% del crecimiento del empleo vinculado al aumento del Valor Añadido Bruto (VAB) iría a parar a los hombres, y sólo el 41,42% a las mujeres”. 

Abordar la igualdad de género, una prioridad

“En el contexto del enfoque de recuperación con perspectiva de género de la UE, un análisis crítico revela una discordia significativa entre las expectativas teóricas y los resultados prácticos, especialmente en lo que respecta a la igualdad de género”, concluye el estudio que incide en que abordar la igualdad de género debería haber sido una prioridad en las políticas comunitarias pospandemia, según lo dispuesto por la Comisión Europea.

La implementación de estas políticas en los Estados miembros, incluido España, presenta “limitaciones” ya que el enfoque de las medidas de recuperación en sectores tradicionalmente dominados por hombres “no ha tenido en cuenta las dimensiones de género en sectores como las transiciones digital y verde”.

“La falta de estrategias de inclusión específicas en el programa Next Generation puede exacerbar los desequilibrios de género existentes. Las mujeres, que han resistido lo peor del impacto económico de la pandemia, se encuentran en desventaja en la actual trayectoria de recuperación”, por lo que es necesario un enfoque “sensible al género” en la planificación de la recuperación. 

 Con todo ello, el estudio pone de relieve la necesidad de una formulación de políticas inclusivas que aborden el impacto de género de las crisis económicas, garantizando que los esfuerzos de recuperación no perpetúen ni empeoren las desigualdades existentes.