El hijo de Emilio Pérez Touriño, director general en el Banco de España
Daniel Pérez Cid, hijo del expresidente de la Xunta, ha sido nombrado director general de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución en el Banco de España
Imagen de archivo de Emilio Pérez Touriño en 2022, cuando presentó su libro ‘El horizonte europeo’ / EFE
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El Banco de España ha nombrado a Daniel Pérez Cid, hijo de Emilio Pérez Touriño, como nuevo director general de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución. El vástago del expresidente de la Xunta relevará en el puesto a Ángel Estrada, quien anunció su renuncia por motivos de salud, aunque continuará como asesor del gobernador, José Luis Escrivá.
Daniel Perez Cid es actualmente el director del Departamento de Regulación en la Dirección General de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución. Previamente, fue jefe de la División de Análisis Macroprudencial y de la Estabilidad Financiera, entre otras responsabilidades. Tras licenciarse en Economía en la Universidad Carlos III, estudió el curso de postgrado del Centro de Estudios Monetarios y Financieros.
En el nuevo cargo tendrá como respaldo a Galo Nuño, como nuevo director general adjunto de Estabilidad Financiera. En la actualidad el responsable de la División de Política Monetaria y Mercado de Capital en la Dirección General de Economía.
El nombramiento de Pérez Cid se produce en el marco de una batería de cambios en la dirección de la entidad, más allá de la reciente incorporación del propio Escrivá. Eva Valle ha sido nombrada directora general de Relaciones Institucionales, Europeas y de Transparencia, y Susana Camiñas ocupará la dirección general adjunta de Supervisión. Todos los nombramientos han sido ratificados por el consejo de gobierno del Banco de España, según ha informado el propio supervisor en un comunicado.
Proceso de selección
El Banco de España señala que se trata de la primera vez que utiliza la fórmula de la expresión de interés para seleccionar a estos nuevos altos cargos. El plazo estuvo abierto hasta el 22 de noviembre y se recibieron más de 60 expresiones de interés, con «excelentes perfiles profesionales», tanto internos como externos al supervisor.
Para la selección de estos perfiles se diseñaron paneles en los que se incorporaron, junto con directivos del banco, personas externas al Banco de España. En paralelo a este proceso, el Gobierno propuso a Paloma Marín, como vicepresidenta de la CNMV, por lo que, ante esta situación, los miembros de los paneles evaluaron a los candidatos y decidieron considerar también durante el proceso de entrevistas la idoneidad de que, entre los perfiles de director general derivados de las expresiones de interés, hubiera algunos que tuvieran las cualidades y competencias para ocupar la dirección general que previsiblemente quedaría vacante.
