El BNG ve «con preocupación» la fábrica de Altri, el mayor proyecto de Galicia a los fondos europeos
La formación está estudiando la documentación presentada por Altri para fijar su posición sobre la planta de Palas de Rei, pero admite que aspectos como el consumo de agua o las necesidades de eucalipto del complejo le preocupan
foto de familia del Grupo Parlamentario del BNG, con Ana Pontón a la cabeza de los 25 diputados logrados el 18 de febrero. – ÁLVARO BALLESTEROS/EUROPA PRESS
Comentarios
El BNG está estudiando la documentación remitida por la portuguesa Altri para desarrollar su fábrica de fibras textiles en Palas de Rei, que a día de hoy constituye el proyecto más voluminoso en cuanto a inversión, cerca de 900 millones de euros, entre los impulsados por Galicia a los fondos Next Generation. La formación nacionalista no ha fijado todavía posición sobre la iniciativa, pues los detalles se han conocido a raíz de la tramitación de permisos en Augas de Galicia y de la declaración como proyecto estratégico por parte de la Xunta. La planta de la pastera lusa fue una de las grandes apuestas del Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo, ahora heredada por el de Alfonso Rueda
La formación que capitanea Ana Pontón admite, en todo caso, que ve «con preocupación» la concepción de la factoría. Fuentes del partido llaman la atención sobre el elevado consumo de agua de las instalaciones, hasta 46.000 metros cúbicos diarios, o sobre los 1,2 millones de toneladas de eucalipto que podría utilizar al año, equivalente al 20% del que se corta en Galicia. A juicio de los nacionalistas, por tanto, contribuirá a incentivar la eucaliptalización de la comunidad.
En el proceso de estudio del proyecto en el que se encuentra ahora el BNG valorará también si presenta alegaciones a la iniciativa, que a pesar de estarse ya tramitando, todavía no está confirmada por parte de Altri, que espera tener primero asegurados fondos europeos antes de ratificar su inversión. La planta, como ya avanzó este medio allá por 2022, estaría compuesta de dos unidades de producción, una de mayor tamaño encargada de producir hasta 400.000 toneladas de pasta soluble al año y otra menor que producirá las fibras textiles con una capacidad máxima de 200.000 toneladas. La primera es la materia prima de la segunda.
Cargos del BNG se pronuncian contra Altri
Aunque el BNG está todavía pendiente de fijar posición, importantes dirigentes del partido ya se han pronunciado en contra del proyecto. Este mismo martes lo hicieron Néstor Rego, diputado en el Congreso, y la eurodiputada Ana Miranda, quien fue especialmente contundente. En su cuenta de la red social X (antigua Twitter), señaló que la factoría «implica destrucción del territorio, naturaleza, formas de vida, economía productiva y patrimonio». «Vender nuestra tierra a industrias de enclave, no es la industria que queremos», aseveró.
O proxecto de #Altri implica destrucción do territorio, natureza, modos de vida, economía produtiva, auga, alimento, patrimonio. Vender a nosa Terra a industrias de enclave, non é a industria que queremos. E querer empregar fondos europeos aparentando cumprir, é trampa #altrinon
— Ana Miranda (@anamirandapaz) March 18, 2024
La presentación de la documentación del proyecto ha generado alarma en colectivos ecologistas, que temen el impacto ambiental de la factoría, también en el río Ulla, que desemboca en una zona de marisqueo como la Ría de Arousa. Marta Gontá, portavoz de la plataforma Ulloa Viva, dijo el pasado sábado que la fábrica supondrá un «desastre ambiental y socioeconómico» para «Palas, A Ulloa, el río Ulla y los 146.000 habitantes de los once municipios que beben del agua de este río y para la producción marisquera de la ría de Arousa».
Adega, por su parte, advirtió que la planta de Altri era «una celulosa de toda la vida», en palabras de Fins Eirexas, por más que intentase vestirse de sostenibilidad. La presidenta de la Agrupación de Mariscadoras a Pé de Carril, María Porto, apuntó que la cantidad de agua que la pastera pretende consumir en el embalse de Portodemouros «le restaría caudal al río, provocando que la contaminación llegue menos diluida y produciendo más daños a los bancos marisqueros de la ría de Arousa».
También el portavoz del BNG de O Barbanza, Adolfo Muíños, ha hecho referencia a cómo afectaría este proyecto al sector mar-industria de la zona, ya que, según ha apuntado, las fábricas de conserva tienen «un consumo muy grande de agua». «Nos preocupa que si se consume mucho, el río no lleve caudal suficiente y acabe derivando en problemas de abastecimiento a la red de la industria conservera de la zona», ha señalado.
En esa jornada, una mesa redonda celebrada en Rianxo sobre el proyecto, participó también el portavoz del BNG de O Barbanza, Adolfo Muíños, quien también mostró sus reservas sobre la iniciativa. «Nos preocupa que si se consume mucho, el río no lleve caudal suficiente y acabe derivando en problemas de abastecimiento a la red de la industria conservera de la zona», dijo.
