“Preciolepsia”, una patología endémica en España
Esta patología se manifiesta en una obsesiva competencia por precio, una bajada sin frenos que provoca fiebre y escalofríos en el cuerpo empresarial, desembocando en un fallo multiorgánico: una empresa en ruinas
¡Ey Tecnófilos! En el ajedrez empresarial, cada movimiento estratégico es crucial y las enseñanzas de Michael Porter en «La Ventaja Competitiva» son más que meras jugadas, son una filosofía de negocio. Porter nos invita a ver más allá del precio, a entender que la competencia es un arte que requiere de una visión estratégica y una constante innovación.
Porter despliega el concepto de la cadena de valor, que permite analizar las actividades de una empresa para encontrar puntos de mejora y diferenciación. Nos habla de dos estrategias esenciales: liderazgo en costes y diferenciación. El liderazgo en costes no es una carrera hacia el precio más bajo, sino una optimización de procesos para ofrecer precios competitivos sin sacrificar la rentabilidad. La diferenciación, por su parte, busca dotar al producto o servicio de atributos únicos, por los cuales los clientes están dispuestos a pagar más.
Sin embargo, en el tejido empresarial español, nos encontramos frente a un enemigo silencioso y persistente: la Preciolepsia. Esta patología endémica se manifiesta en una obsesiva competencia por precio, una bajada sin frenos que, aunque desconocida en sus razones de ser tan prevalente en nuestro país, provoca fiebre y escalofríos en el cuerpo empresarial, desembocando en un fallo multiorgánico: una empresa en ruinas.
La Preciolepsia es la antítesis de la cadena de valor de Porter. Mientras Porter promueve la eficiencia y la innovación, la Preciolepsia lleva a las empresas a un sacrificio desmedido de la calidad y la inversión en el futuro. Es una estrategia cortoplacista que puede parecer rentable al principio, pero que es insostenible a largo plazo. La diferenciación y el liderazgo en costos, bien implementados, crean un escudo contra la competencia y fomentan la fidelidad de los clientes, algo que la competencia basada solo en precios nunca podrá asegurar.
El tratamiento de la Preciolepsia no es sencillo, ya que requiere un cambio de mentalidad y una apuesta por la innovación y la creación de valor. Las empresas españolas deben resistir la tentación de entrar en esta espiral de descuentos y enfocarse en construir una propuesta de valor sólida que las distinga de sus competidores.
Porter nos muestra que la ventaja competitiva sostenible se logra a través de la adaptación continua y la innovación. En contraste, la Preciolepsia es una estrategia estática que deja a las empresas expuestas a cualquier cambio en el entorno económico o en las preferencias de los consumidores.
Para concluir, la obra de Porter es un manual para construir empresas fuertes y duraderas. Nos recuerda que competir en precio puede ser parte de una estrategia más amplia, pero nunca debe ser el único enfoque. La Preciolepsia, por otro lado, es una enfermedad que debe ser combatida con una dosis de innovación, eficiencia y valor agregado. Las empresas que lo comprendan no solo sobrevivirán, sino que se destacarán en el mercado global.