¿Nos sentimos seguros?

En un mundo cada vez más interconectado, la percepción de la seguridad se ha convertido en un tema de vital importancia para los ciudadanos y los gobiernos. El reciente informe Global Safety Report, anteriormente conocido como el Law and Order Report, ofrece una visión amplia sobre la seguridad en diferentes países, permitiendo a los líderes mundiales evaluar el progreso hacia el objetivo de las Naciones Unidas de construir un mundo más pacífico y seguro. Una quimera al paso que vamos.

El caso es que el estado de la seguridad global está en constante evolución. Durante casi 20 años, Gallup ha preguntado a las personas sobre sus percepciones de seguridad personal, en 140 países de todo el mundo. Respecto a los datos recabados durante 2023 y ahora publicados, el ranking de seguridad lo encabeza Kuwait (98 puntos sobre 100) y lo cierra Líbano (50).

En el caso de España, aunque solo desciende un punto (87) con respecto al informe del año anterior, en cambio pasa del puesto 21 al 31, entre otros motivos, debido a la progresiva incorporación en materia de seguridad de autocracias, como los Emiratos Árabes (90), Bahréin (89), El Salvador (89), Arabia Saudí (89), China (88) o Egipto (88).

Sin olvidar tampoco que países democráticos, con libertades y derechos humanos, como Noruega (93), Estonia (91), Finlandia (91), Islandia (91), Luxemburgo (91), Suiza (91) o Dinamarca (90) siguen liderando en materia de seguridad ciudadana. Por lo que el debate entre libertades o derechos y seguridad también tiene su reflejo estadístico en este informe.

De hecho, el Global Safety Report 2024 constata que más personas (71%) se sentían seguras caminando solas por la noche que hace una década, un aumento en comparación con años anteriores, pero con una ligera disminución desde 2020. También la sensación de seguridad al caminar solo por la noche en Israel cayó del 88%, antes de los ataques del 7 de octubre de 2023, al 68% después; continuando Ecuador como el “farolillo rojo” en este apartado de seguridad en las calles (27%).

A pesar de “la que está cayendo”, la tendencia general en Europa occidental muestra niveles relativamente altos de confianza en la seguridad. La mayoría de los países europeos, incluida España, tienden a reportar sentimientos de seguridad superiores al promedio global. La confianza en la policía local es uno de los factores más influyentes en esa percepción de seguridad.

Otro dato interesante del informe es que, a nivel global, hay una notable diferencia en la percepción de seguridad entre hombres y mujeres, siendo los hombres más propensos a sentirse seguros en sus comunidades. Este patrón también se observa en España, donde es importante abordar estas desigualdades para mejorar la percepción de seguridad entre todos los géneros.   

La percepción de seguridad es un reflejo de la confianza en las instituciones y en la capacidad del Estado para proteger a sus ciudadanos

El informe revela que un alto porcentaje de la población española se siente segura en su entorno. Este aspecto es fundamental, ya que la percepción de seguridad no solo afecta a la calidad de vida de las personas, sino que también influye en la cohesión social y en la actividad económica.

En particular, el 78% de los españoles encuestados afirmaron sentirse seguros caminando solos por su vecindario después del anochecer. Esta cifra es notablemente alta en comparación con la media global, lo que sugiere que, a pesar de los desafíos que enfrenta el país, los ciudadanos confían en su entorno inmediato.

El informe también permite realizar comparaciones con otros países europeos y del mundo. Así, mientras que naciones como Suecia y Francia han reportado preocupaciones crecientes en torno a la seguridad, España ha mantenido una estabilidad notable.

Sin embargo, no todo es positivo. A pesar de la percepción general de seguridad, ciertos sectores de la población, como las mujeres y los jóvenes, expresan preocupaciones específicas sobre la violencia de género y la delincuencia juvenil. Estas preocupaciones resaltan la necesidad de un enfoque más matizado en las políticas de seguridad, que aborde no solo la criminalidad en términos generales, sino también las particularidades que afectan a grupos vulnerables.

La violencia de género sigue siendo un problema grave, con cifras alarmantes que indican que miles de mujeres son víctimas de violencia cada año. El informe destaca que, aunque las autoridades españolas han tomado medidas para combatir este fenómeno, la percepción de inseguridad entre las mujeres es una llamada de atención para la sociedad y el gobierno.

Además, la llegada de nuevas tecnologías y la creciente digitalización han traído consigo nuevos tipos de delitos, como el ciberacoso y el fraude digital o en línea. Estos delitos requieren una respuesta adaptativa por parte de las fuerzas de seguridad y un enfoque proactivo en la educación y concienciación de la ciudadanía. La educación en valores de respeto y convivencia se presenta como una herramienta fundamental para prevenir la violencia y fomentar una cultura de paz.

La percepción de seguridad es un reflejo de la confianza en las instituciones y en la capacidad del Estado para proteger a sus ciudadanos. Por lo tanto, es responsabilidad de todos, desde el gobierno hasta cada individuo, trabajar juntos para construir un futuro más seguro y pacífico. En un momento en que la polarización y la desconfianza pueden amenazar la cohesión social, es fundamental mantener un compromiso activo con la seguridad y el bienestar. Solo así podremos avanzar hacia un entorno mejor.