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Los retos del emprendimiento en Galicia
Los empresarios son la fuente primordial de generación de riqueza y empleo por lo que no debemos descuidar la adopción de medidas necesarias para fomentar el emprendimiento y para facilitar la puesta en marcha de iniciativas empresariales
Desde la perspectiva empresarial en Galicia, específicamente, se ha demostrado un interés en promover el emprendimiento y la innovación. Se han desarrollado ecosistemas empresariales que respaldan la creación de nuevas empresas; se ha observado una diversificación de las industrias y la exploración de nuevas oportunidades con un enfoque en sectores como la tecnología, la pesca y la agroindustria. La diversificación empresarial es vista como esencial para adaptarse a las cambiantes condiciones económicas y para evitar la dependencia de un solo sector.
Los empresarios son la fuente primordial de generación de riqueza y empleo, por ello no debemos descuidar la adopción de medidas necesarias para fomentar el emprendimiento y para facilitar la puesta en marcha de iniciativas empresariales.
Debemos promover una imagen del emprendedor y del empresario en positivo, de valor. Dicha imagen debe ser proyectada a la sociedad desde la escuela, presentando el emprendimiento como una opción atractiva y valorada desde edades tempranas.
Pero además, es necesario impulsar medidas que hagan posible que especialmente los más jóvenes puedan emprender, como instrumentos de financiación y garantías adecuadas para proyectos viables; medidas que favorezcan la sucesión de empresas y negocios, permitiendo la cotitularidad durante períodos de transición; agilidad y simplificación de la tramitación administrativa necesaria para poner en marcha un negocio; coordinación entre administraciones, procedimientos sencillos y resolución ágil; y formación adecuada y adaptada a quienes quieren emprender.
El emprendimiento en España ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, con un entorno empresarial en constante evolución. La economía española ha visto un aumento en la creación de nuevas empresas y startups en diversos sectores, incluyendo tecnología, turismo y energías renovables.
En nuestra comunidad autónoma, la Xunta de Galicia ha promovido la digitalización como un proceso clave para mejorar la competitividad de las empresas gallegas. Esto implica la adopción de tecnologías digitales en los procesos empresariales y la expansión de las operaciones en línea, lo que contribuye a la diversificación de los canales de ventas y la expansión de mercados internacionales.
Hace tan solo unos días, presentábamos en la sede de la CEG, en Santiago de Compostela, el informe GEM 2022-2023 y constatábamos que, en Galicia, y resulta evidente, tenemos una fuerza laboral altamente cualificada y una larga tradición empresarial que ha fomentado el espíritu emprendedor.
En este sentido, desde la Confederación de Empresarios de Galicia intentamos identificar los desafíos específicos que enfrentan las empresas en los diferentes sectores y comprender su impacto en los negocios, así como estar actualizados sobre las últimas tendencias y cambios en la industria, para poder dar soporte durante el emprendimiento.
Cada nueva hornada de empresarios y empresarias ha de aprovechar las oportunidades que ofrece la transformación digital para mejorar los procesos y la eficiencia de sus empresas. Todos juntos, debemos caminar en la senda del fomento de la colaboración y la creación de redes entre empresas del mismo o de diferentes sectores. Esto puede abrir nuevas oportunidades de negocio y aumentar la capacidad de las empresas para competir en un mercado cada vez más global.
Nuestra región continúa labrando un entorno propicio para el emprendimiento
De ahí la importancia de los informes del GEM, donde se ha observado un crecimiento constante en el fenómeno emprendedor en Galicia desde 2005. Esto sugiere que nuestra región continúa labrando un entorno propicio para el emprendimiento, con un aumento en la creación de nuevas empresas y oportunidades de negocio.
Los perfiles elaborados en sus páginas nos ayudan a comprender quiénes son las personas emprendedoras gallegas. Por ello, no debemos perder de vista que los datos recogidos en el año 2022 por el Grupo GEM Galicia observan un incremento en la población con intención de emprender en los próximos años, por lo que nuestra comunidad autónoma ofrece un panorama estable, seguro y apetecible en los distintos ámbitos del ecosistema emprendedor. Destacando además un fenómeno imparable: el crecimiento de las iniciativas de mujeres.
Galicia muestra un compromiso continuo en respaldar el emprendimiento, con apoyo gubernamental, programas de aceleración y reconocimiento a los emprendedores y favoreciendo la creación de «business factories» para acelerar empresas en áreas específicas, lo que, sin duda, está estimulando la innovación y el emprendimiento.
Nuestra misión, desde la CEG, es informar a las nuevas generaciones de dónde están los sectores empresariales estratégicos, los nichos de empleo; dirigir los esfuerzos hacia la formación de las personas, aquellas que aporten un valor añadido.
Queda patente que fomentar la colaboración entre empresas, administraciones, nuestras universidades y los centros de formación profesional, para identificar las necesidades del mercado y desarrollar programas formativos adaptados a las exigencias actuales y futuras, resulta imprescindible.
La profesionalización y la formación serán clave para desarrollar las habilidades y competencias necesarias para desempeñar un nuevo emprendimiento de manera eficaz y eficiente, y para adaptarse a los cambios y las nuevas exigencias del mercado.
No podemos dejar de decir, en este sentido, y algo con lo que insistimos desde la CEG a cada nuevo gobierno, que en los últimos años hemos sufrido un aluvión de normas, que han venido a constituir una sobrerregulación que dificulta la puesta en marcha y desarrollo de proyectos empresariales y generan una creciente inseguridad jurídica, con fuertes interacciones entre diferentes instrumentos y a veces escasa coordinación.
Es necesario volver a un sistema de elaboración de normas sosegado, racional y con una participación adecuada de los sectores y colectivos afectados. Es necesario abandonar el sistema de regulación por decreto y optar por un sistema más participativo, que permita dar respuesta a las necesidades y fines de la ley, sin perjuicio de considerar las necesidades de las partes implicadas por dicha regulación.
Es preciso avanzar en la reducción de las cargas administrativas, especialmente sobre aquellas que sean más gravosas para las empresas, y evitar que la nueva legislación añada nuevas cargas que contrarresten otros efectos beneficiosos. Es imprescindible evaluar el impacto económico de cada nueva disposición, tanto para el ámbito público como para el ámbito privado afectado.
Es precisa una reforma fiscal justa y sin agravios entre territorios, orientada a la creación de actividad económica y en consecuencia, empleo y desarrollo económico y social.
La reforma fiscal que necesitamos debe articular un modelo que implique bajadas en los impuestos
Apostamos por un modelo que reduzca y simplifique nuestro sistema fiscal, tanto en número de tributos como en presión, tanto a ciudadanos como empresas. Esto permitirá una mayor margen para las nuevas inversiones. Y apostamos también por una reducción de la presión fiscal en este momento sobre las empresas y profesionales, como ya están haciendo otros Estados vecinos, que no comprometan la supervivencia de nuestro tejido productivo.
La reforma fiscal que necesitamos debe articular un modelo que implique bajadas en los impuestos (pero una bajada para todos, generalizada, porque los empresarios que tienen más patrimonio, que crean riqueza y empleo, son a su vez los que también pagan más impuestos); e incentivos para atraer inversión y talento.
El nuevo paradigma del emprendedor, el de una nueva generación joven que opta por el autoempleo y la creación de empresas destaca la importancia de la rentabilidad sobre el hipercrecimiento, marcando un cambio en la mentalidad empresarial hacia la sostenibilidad financiera. Se plantea la necesidad de más inversión de riesgo y una mayor presencia femenina en el ecosistema emprendedor como desafíos a abordar. Incluye tendencias hacia la sostenibilidad, con un enfoque en prácticas empresariales respetuosas con el medio ambiente.
La búsqueda revela tendencias como la búsqueda de oportunidades en el nuevo paradigma energético y el impulso hacia la descarbonización. El aprendizaje se presenta como el foco del proceso emprendedor, indicando un cambio en la forma en que los emprendedores abordan sus proyectos.
En el estudio de investigación “Educación para el emprendimiento: un enfoque orientado a incrementar las posibilidades de éxito y evitar el fracaso prematuro”, cuyo autor es Joaquín Puerta Gómez, abogado y doctorando en Derecho y Sociedad por la Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA, (junto con Pedro Aceituno y Ma. Concepción Burgo) alude a que la tasa de actividad emprendedora en España se sitúa por debajo de la media de los países de la Unión Europea, situación que contrasta con la afirmación realizada por el Global Entrepreneurship Monitor (GEM), pues manifestaron que España se encontraba entre los países con mejores ecosistemas para emprender. Y hace referencia a los factores clave que inciden en el fomento del emprendimiento: la financiación de los proyectos, la cultura emprendedora y la formación en emprendimiento.
¡Formación! Joaquín Puerta explica que el escaso nivel de conocimientos que los alumnos muestran en el área económico-financiera, constatados por el informe PISA y el Instituto Nacional de Evaluación Educativa, el Banco de España y la CNMV, bien puede estar correlacionado con la percepción que poseen los jóvenes sobre el emprendimiento. Como dice el autor “si verdaderamente pretendemos que la intención emprendedora de los jóvenes españoles se incremente, la orientación del sistema educativo en general y del universitario en particular debe dirigirse hacia el desarrollo de los factores y capacidades necesarias para emprender”.
Por ello, y desde la Confederación de Empresarios de Galicia, lo repetiremos como lema: el sistema educativo debe incluir, desde edades tempranas, los valores emprendedores. La educación en el emprendimiento transformará personas, sociedades y al mundo, hoy y siempre, en nuestro país y en cualquier parte del mundo.