Abanca supera por primera vez en beneficios a Bankinter con la integración de Eurobic
El banco luso aporta 350 millones al resultado contable del banco de Juan Carlos Escotet, que logra sus mayores ganancias históricas; en 2014 alcanzó los 1.157 millones de beneficio, pero se debió a los créditos fiscales activados tras la compra de Novagalicia
Juan Carlos Escotet, presidente de Abanca, interviene durante una jornada de finanzas sostenibles organizada por la entidad / Abanca
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Abanca ha cerrado su último ejercicio con unos beneficios de 1.203 millones de euros, un avance del 69,1% respecto al ejercicio anterior y el récord histórico de la entidad, que consigue justo en el año de su décimo aniversario de trayectoria. Juan Carlos Escotet adquirió Novagalicia en diciembre de 2013 y la rebautizó como Abanca en el verano de 2014. Solamente en aquel ejercicio, cuando la entidad acabó con un resultado positivo de 1.157 millones, obtuvo unas ganancias similares a las actuales, pero en aquella ocasión se debía a la activación de créditos fiscales después de la compra, y no al propio negocio del banco.
En esta década, la entidad se ha convertido en el séptimo mayor banco de España tras elevar su volumen de negocio minorista desde los 57.469 millones hasta los 128.443 millones con los que ha cerrado su último ejercicio. Por el camino mediaron una multitud de operaciones corporativas, tanto desinversiones vinculadas a la cartera industrial que heredó de las cajas (como Cupa, R o Tecnocom), como una decena de compras o ampliaciones de actividad (la creación de la división de seguros) que han ido endulzando los resultados.
El beneficio récord de 2024 está respaldado por la aportación de la lusa Eurobic, que elevó unos 350 millones las ganancias e hizo que, por primera vez, el banco superase el resultado de Bankinter, pues la entidad que dirige Gloria Ortiz se quedó en los 953 millones, un alza del 13% frente al 69,1% de Abanca.
El volumen de negocio continúa siendo bastante más elevado, 223.000 millones frente a los 128.443 de la heredera de las antiguas cajas gallegas, un 13,6% más que el año anterior. Y lo mismo sucede con los activos, de 121.972 millones en comparación con los 83.847 millones de la entidad que preside Escotet. Abanca tiene muy cerca, eso sí, a Unicaja, cuyos activos se situaban a cierre del tercer trimestre en 97.000 millones.
La aportación de Eurobic
Abanca cerró la compra de Eurobic en julio del año pasado, convirtiéndose en el séptimo banco de Portugal y alcanzando un volumen de negocio de 20.000 millones. El banco luso, cuya adquisición ya había intentado sin éxito la entidad gallega, servirá también como cabecera del grupo en el país vecino, que está siendo un territorio de especial atención para Escotet. Allí compró, en una de las primeras operaciones de crecimiento inorgánico de la entidad, la red de Deustsche Bank, y ahora cuenta con casi 2.000 empleados, 250 oficinas y más de 325.000 clientes.
El beneficio de Abanca se situaría en los 853,3 millones de no ser por el efecto positivo de la integración del banco portugués, que añadió un resultado positivo de 349,7 millones a las ganancias por el efecto de badwill, el fondo de comercio generado por el mayor valor contable de la entidad respecto al precio de su adquisición y que se registra como un ingreso en la cuenta de resultados. Targobank, por ejemplo, aportó 165 millones en 2023.
Eurobic cerró el ejercicio de 2014 con un volumen de negocio de 12.456 millones, conformado por 5.204 millones en créditos y 7.128 millones en depósitos. Los beneficios alcanzaron los 84,1 millones. El ROTE, un indicador de la rentabilidad, fue del 11,1%, bastante inferior al de Abanca, del 16,5%, o al de Bankinter (19%) la entidad que S&P prevé que obtenga la mayor rentabilidad en 2025 de la banca española. El ratio de capital (CET1), sin embargo, está por encima del de su nuevo dueño, pues se situó en el 18% frente al 13% del banco gallego.
Más clientes y más morosidad
Las integraciones, como casi todo, ofrecen oportunidades y presentan retos. A Abanca le están permitiendo acelerar el número de clientes, con 135.000 nuevas altas durante 2024, e incrementar su volumen de negocio. En ambos casos, Portugal está teniendo un importante protagonismo. Aportó 22.179 nuevos clientes y fue clave también en la mayor concesión de crédito, pues el incremento de España fue de un 6,6% mientras que en territorio luso se multiplicó por 2,5. En conjunto, los créditos alcanzaron los 48.920, un 8% más, mientras que los depósitos minoristas aumentaron un 17,2% y se situaron en los 62.773 millones.
En contrapartida a las operaciones inorgánicas, la tasa de morosidad subió ligeramente, pasando del 2,4% al 2,6% en 2024, niveles en todo caso muy bajos si se comparan con el 13,6% de hace una década, el primer año de la trayectoria de Abanca. También subieron un 15% los activos dudosos, hasta los 1.299 millones. En todo caso, el banco mantiene una elevada tasa de cobertura, que se situó en el 77,9% a cierre del ejercicio, 733 puntos básicos por encima del sistema, según asegura. Dispone de 23.412 millones de euros en activos líquidos, cifra equivalente a 4,5 veces sus vencimientos previstos de emisiones.
