Tavares viaja de urgencia a EE UU para atajar la caída de beneficios de Stellantis y calmar a los inversores
El CEO del grupo automovilístico estará esta semana en Detroit para impulsar un plan que revierta el retroceso de las ganancias y para enviar un mensaje de tranquilidad a trabajadores y accionistas, después de que un grupo de ellos demandara a la compañía
El CEO de Stellantis visitará Detroit esta semana para intentar hilvanar un plan que enderece las operaciones en el mercado norteamericano ante la caída de beneficios del grupo automovilístico en el primer semestre del ejercicio. Carlos Tavares busca también enviar un mensaje de tranquilidad a los trabajadores y a los accionistas, después de que un grupo de inversores demandara a la compañía por ofrecer información engañosa sobre datos clave para valorar la evolución del negocio, según explicó una fuente a Reuters.
El primer ejecutivo de Stellantis viaja a Estados Unidos con frecuencia, presentándose en las plantas del grupo cada cuatro o seis semanas. Sin embargo, en esta ocasión pretende enviar un mensaje a inversores y trabajadores, según indica la misma fuente. «Quiere dejar claro que está manejando la situación personalmente. Las operaciones de Norteamérica básicamente están financiando al resto del grupo«, señaló a Reuters.
La pasada semana trascendió que un grupo de accionistas de Stellantis presentaron una demanda en el tribunal federal de Manhattan, acusando a la compañía de ocultar información clave sobre las debilidades del negocio en este ejercicio para inflar artificialmente su valor en bolsa. La denuncia apunta que Stellantis hizo valoraciones «abrumadoramente positivas» sobre el margen operativo, los nuevos productos o los inventarios, ocultando que estos estaban aumentando. Además de a la compañía, también demandan al propio Tavares y a la directora financiera Natalie Knight.
Declive en bolsa
Durante la visita a las oficinas estadounidenses, el CEO de Stellantis se reunirá inicialmente con los gerentes de primera línea, antes de formular una estrategia que permita revertir la tendencia negativa del negocio, según la fuente. En el primer semestre del año, los beneficios operativos del grupo cayeron un 40%, lacerados por el mal comportamiento en el mercado norteamericano.
Tavares dijo en su momento que los resultados eran «humillantes» y que el desempeño en Estados Unidos se había visto afectado por los altos inventarios, problemas de fabricación y falta de pericia a la hora de abordar el mercado. El grupo se ha depreciado un 50% en bolsa desde los máximos alcanzados en marzo de este año.