Repsol y Endesa se suman a Navantia como grandes clientes de Amper en su llegada a Ferrol y A Coruña

Amper, el grupo de ingeniería y defensa que preside el exministro Pedro Morenés, ha apostado por Galicia para el desarrollo de su negocio de fabricación de componentes y estructuras para eólica marina. Tras la adquisición de la fábrica que cerró Siemens-Gamesa en As Somozas, la compañía está desarrollando una inversión de 40 millones para reforzarse en los puertos de Ferrol y A Coruña.

En el primero tiene una concesión de 70.000 metros cuadrados durante 30 años, mientras que en la dársena herculina ha solicitado otros 40.000 metros cuadrados. Estas instalaciones servirán de respaldo a Navantia, el principal cliente de la filial de construcción naval y eólica offshore Nervion Naval, que ahora ha cambiado su nombre por WindWaves para la etapa de internacionalización.

En este plan, la planta de As Somozas servirá también de apoyo en la producción de componentes y estructuras para los aerogeneradores marinos y completará su actividad con la producción de velas rígidas.

Los grandes clientes de Amper

Además de Navantia, otros dos grandes clientes tienen un peso específico en la cifra de negocio de Amper, que el año pasado acarició los 370 millones. Y ambos tienen una fuerte implantación en Galicia. El más relevante es Repsol, a la que facturó 104 millones en los dos últimos ejercicios. La compañía con refinería en A Coruña representó en el pasado curso el 14% de los ingresos de Amper, con 51,4 millones y fue su mayor cliente en 2022, alcanzando un peso del 16,3% en la facturación.

Endesa fue el mayor cliente de la compañía que dirige Enrique López el año pasado. Amper lleva tiempo trabajando con la eléctrica a través de su área de mantenimiento industrial en las centrales de generación. En 2023, facturó al grupo de José Bogas casi 64 millones, equivalentes al 17,3% de sus ingresos.

Los trabajos para Navantia, Repsol y Endesa representaron el 40% de la cifra de negocio en los dos últimos ejercicios. En el caso de los astilleros públicos, que son el principal cliente de WindWaves (Nervion Naval), el volumen de negocio ascendió a 85 millones en dos años.

Los números de Amper

El año pasado, Amper dejó atrás los números rojos y cerró con 2,1 millones de beneficios. La facturación creció un 14,25%, hasta los 369,4 millones, y el ebitda se duplicó, pasando de los 11,2 millones de 2022 a 25,4 millones al año siguiente. Una evolución similar se produjo en el margen de ebitda, pues pasó del 3,5% a casi el 7%.

El negocio de energía y sostenibilidad, que incluye la eólica marina, generó 286 millones de ingresos y era el más destacado en la cartera del grupo a cierre de ejercicio con 298 millones en contratos. Entre ellos estaba el mayor de la historia del grupo, que firmó el año pasado con Navantia para el ensamblado y construcción de las jackets para el parque de Dieppe Le Tréport de Engie y EDP por más de 140 millones.

En la cartera de contratos de Amper, situada en los 386 millones a cierre de 2023, estaban también la fabricación de estructuras offshore para subestaciones eléctricas, de nuevo con los astilleros públicos; la construcción del parque fotovoltaico Centurión de Endesa en Badajoz; la construcción de la central hidráulica de Valdecañas para Iberdrola; o el mantenimiento industrial de plantas de Repsol, BASF y Endesa.

Los presidentes de los puertos de A Coruña, Martín Fernández Prado, y Ferrol, Francisco Barea, junto con Enrique López, CEO del Grupo Amper, y Roberto Bouzas, director general de WindWaves / Amper