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El crecimiento de Mercadona dispara la facturación de sus queseros Entrepinares y Queizuar
Queizuar, que suministra queso Arzúa-Ulloa a la cadena de Juan Roig, crecerá a doble dígito en 2024 por la mayor demanda en España y Portugal, mientras que las previsiones de Enrepinares, con planta en Vilalba, apuntan a un incremento del volumen de negocio próximo al 5%
Mercadona superó en 2023 los 35.000 millones de volumen de negocio, un crecimiento del 15% que le permitió superar a Auchan –dueña de Alcampo— y situarse como el undécimo grupo de distribución alimentaria de Europa por facturación a pesar de operar solamente en dos mercados, el español, donde es líder por cuota de mercado, y el portugués. El avance de la cadena de supermercados de Juan Roig impulsa el crecimiento de sus grandes proveedores, que van incrementando sus cifras a medida que intensifican el suministro a la compañía valenciana.
Esto ocurre en las queserías que operan en Galicia, la principal despensa de leche de España. Entrepinares, el gran proveedor de quesos de para Hacendado con plantas en Vilalba, Valladolid y Fuenlabrada (además de una en Toledo bajo la marca Lordi); y Queizuar, la empresa gallega con fábrica en Touro que suministra quesos Arzúa-Ulloa a Mercadona, ya avanzaron un incremento de la cifra de negocio durante el ejercicio de 2024, en buena medida debido a la mayor demanda del grupo de Juan Roig.
Queizuar crecerá a doble dígito
La empresa de Benigno Pereira acabó 2023 con una facturación de 16,3 millones, superando los 13 millones de ingresos de 2022 gracias a un incremento en los precios y a un aumento del 6% en los kilos vendidos. El ejercicio supuso para Queizuar el regreso a las cifras previas al periodo inflacionista, ya que pudo repercutir al cliente parte del incremento de los costes que estaba conteniendo desde hacía un año. Con 12,4 millones en activos y un beneficio de más de un millón, cuatro veces más que los 214.000 euros que ganó en 2022, el productor gallego dejó claro en su informe de gestión las elevadas expectativas para 2024, cuyas cuentas cerradas se suelen presentar durante el primer semestre del año.
Explicaban los administradores de Queizuar, el propio Benigno Pereira y Ángeles Calvo, confundadora de Queixería Bama, que el crecimiento de las ventas a Mercadona era superior al del resto de clientes y al de la propia Denominación de Origen, destacando especialmente el suministro a Portugal, con un incremento próximo al 70%. Allí, Mercadona está en pleno proceso de expansión desde su desembarco en julio de 2019, abriendo aproximadamente una decena de supermercados al año.
La empresa gallega añadía que en los primeros meses de 2024 el incremento de las ventas, especialmente a Mercadona, se situaba por encima del 20%. Debido a ello, consideraba que superarían el objetivo de aumentar la cifra de negocio en un 5% anual. De hecho, estimaron un crecimiento entre el 15% y el 20% durante el curso, según recoge el informe de gestión consultado por este medio a través de la plataforma Insight View. Advierte Queizuar en el documento que incluso deberá plantearse una ampliación de las instalaciones ante el aumento de la demanda, precisamente, cuando encara la recta final de su plan de inversiones 2023-2025, enfocado a la modernización de la planta y a la sostenibilidad.
Queizuar está controlada por las sociedades Pereimos 2007 e Inmuebles Gallegos Vidnovo y tiene como marcas de referencia Bama y Punteiro. La familia reinvierte los beneficios en las instalaciones de la propia empresa y en proyectos de I+D, pues en los últimos cinco años solo ha repartido un dividendo de 5 millones en 2021. La otra empresa vinculada, Queixerías Bama, tiene una facturación próxima a los cinco millones anuales.
Entrepinares también batirá previsiones
Aunque no es el único, el quesero por excelencia de Mercadona es el grupo vallisoletano Entrepinares, muy arraigado también en Galicia gracias a su planta de Vilalba. La sociedad de cabecera de la compañía es Ferrer y Barry sl, que aglutina el negocio del aceite y las bodegas de la compañía, que se suman a la actividad principal de producción y venta de quesos. El holding finalizó 2023 con una facturación de 622,4 millones, experimentando un importante crecimiento en los dos últimos ejercicios, donde la cifra de negocio se elevó un 23% en 2022 y un 18% en 2023. Los beneficios de este último año ascendieron a 28,6 millones, ligeramente por encima de los 26,8 millones de 2022.
El negocio vinculado a la producción quesera es algo menor, pues Grupo Entrepinares cerró con una facturación de 615 millones. Según recogen las cuentas de la matriz, Queserías Entrepinares generó un resultado positivo de 20,3 millones, casi el doble que los 11,4 millones de 2022. La previsión para 2024 era alcanzar una facturación de 640 millones, lo que equivaldría a un crecimiento del 4%. Sin embargo, según avanzó Alimarket en diciembre, la compañía da por hecho que superó esa cifra durante el último ejercicio. Como sucede con Queizuar, la mayor estabilidad de los costes operativos debería facilitar un incremento de la rentabilidad.
Entrepinares, que viene de culminar una inversión de 25 millones para ampliar su planta lucense, es también un actor clave en el campo gallego por su relevante volumen de recogida de leche. Tanto la empresa pucelana como Naturleite, filial de Covap que abastece de leche a Mercadona, suelen situarse entre las industrias que más pagan a los ganaderos por litro.
La ‘mercadonadependencia’
Ferrer y Barry superaba los 500 millones en activos a cierre de 2023, con un patrimonio neto de 318 millones y reservas por valor de 247,5 millones. La venta de quesos aporta el 94% del volumen de negocio, al alcanzar los 584,9 millones en el último ejercicio cerrado, en el que se incrementa el peso de este segmento respecto a 2022, cuando representaba el 90,5% de la facturación. Otros 30 millones proceden de la venta de suero y de leche, mientras que las bodegas aportaron 2,1 millones en 2023 y el aceite casi 2 millones.
Explica el grupo en su informe de gestión que su principal empresa, Queserías Enrepinares, tiene una elevada concentración de su negocio en un solo cliente, Mercadona, pero que esta situación de dependencia no debe preocupar, pues es uno de los proveedores con mayor presencia en la cadena de Juan Roig y «con una relación estable en el tiempo, basada en la confianza mutua y con voluntad de permanencia». La tan saludable relación comenzó en el año 2000, por lo que está cerca de celebrar sus bodas de plata.