La minera de Touro cifra en 1.200 millones el presupuesto de la explotación de cobre
Cobre San Rafael asegura que “la vida total del proyecto”, que ocupará 800 hectáreas de terreno, será de 16 años y medio, teniendo en cuenta construcción y desmantelamiento
Más de 1.200 millones de euros es lo que prevé gastar Cobre San Rafael en la ejecución y explotación de la mina de Touro y O Pino, proyecto que promueve la compañía participada por Explotaciones Gallegas y Atalaya Mining y que se encuentra ya en fase de exposición pública.
En la documentación expuesta y consultada por Economía Digital Galicia, los promotores del proyecto defienden que se trata de una apuesta por la “minería sostenible”, que cuenta con las “mejores técnicas disponibles de carácter ambiental para la extracción de cobre en un yacimiento histórico”.
Un proyecto que se mantendrá 16 años
El ámbito de actuación del proyecto englobará más de 800 hectáreas de terreno. La idea es alcanzar una producción anual de 63.854 toneladas de concentrado con un 27% de cobre, en la primera fase, ampliando la capacidad hasta las 102.166 toneladas en la segunda.
La vida de explotación de la mina será de unos 14 años, 13 de explotación y uno más de producción en la planta, que procesará el minera acumulado. Teniendo en cuenta, además, los tiempos previstos de construcción, unos 18 meses, y clausura, un año, la vida total del proyecto será de 16 años y medio.
Presupuesto
En este tiempo, Cobre San Rafael prevé la generación de 400 puestos de trabajo directos y más de 1.500 indirectos. Además, en la documentación en exposición pública indica que maneja un presupuesto de más de 1.200 millones de euros. En concreto, prevé gastar unos 195 millones de euros en inversiones iniciales entre costes de propiedad, instalaciones para el tratamiento de la extracciones, infraestructuras y las propias instalaciones de la mina.
Además, estima un gasto de otros 44 millones de euros como “capital de mantenimiento” y de 975 millones que califica de “costes de operación”, es decir, asociados a la vida de la explotación minera.
Durante el periodo de explotación prevé unos gastos de 350 millones de euros, de 620 millones en todo el proceso de producción. El desmantelamiento de las operaciones está presupuestado en unos 2,5 millones de euros mientras que la restauración medioambiental se llevará otros 13,3 millones.
Sin «afecciones»
Asegura Cobre San Rafael que el proyecto “garantiza la mínima afección a los cursos de aguas superficiales existentes, mediante la selección de emplazamientos para la distintas instalaciones mineras que causen el menor impacto sobre este medio”. Por otro lado, asegura que llevará a cabo una restauración progresiva de las superficies y la rehabilitación de los pasivos ambientales existentes.
También indica que la mina “no afecta al Camino de Santiago ni a su ámbito de respeto y reduce considerablemente la posible incidencia visual que pueda tener sobre el mismo”.