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El plan de Altri: prevé atar las ayudas para la planta de fibras en verano y arrancar a final de año
El director del plan para levantar la fábrica de Palas de Rei afirma quelos plazos “dependen de la Administración” y que el plazo de construcción en cuanto empiecen las obras oscilará entre los 33 y los 36 meses
Altri calcula que las ayudas para la planta de fibras sostenibles que proyecta en Palas de Rei se concretarán después del verano. Una vez confirmada la financiación, según sus cuentas, los primeros pasos para levantar la factoría podrían darse en el último trimestre del año. En cuanto comiencen los trabajos, el plazo de construcción podría situarse entre los 33 y los 36 meses.
Así lo ha explicado en una entrevista a El Progreso Bruno Dapena Alonso, el director del proyecto para la construcción de la planta en el concello lucense. En todo caso, señala que estos plazos “dependen de la Administración” y no de la compañía.
Creación de empleo
Sobre la generación de empleo, el ingeniero químico vigués confirma que en la primera fase está contemplada “la creación de 500 puestos directos, que trabajarán por turnos, y unos 2.000 indirectos, que son de servicios vinculados a transporte, vigilancia, seguridad, etcétera”. Dapena se desmarca así de las críticas de los opositores a la planta que acusan a la compañía de mentir y que reducen a 200 las puestos asociados a la planta. “En realidad no entendemos ese baile de números, cuando nosotros siempre hemos mantenido las mismas cifras”.
Con respecto al perfil de los profesionales que serán contratados de forma directa por la pastera portuguesa, Dapena señala que “habrá un poco de todo”, desde personal de dirección y alta cualificación hasta operarios del proceso o mantenimiento. Tal y como explica, la compañía dará cursos de formación para todos los puestos que se puedan necesitar y la previsión es que los profesionales procedan de las comarcas circundantes.
Respuesta a las críticas
El responsable del plan para construir la planta considera que gran parte de las críticas que recibe la iniciativa –especialmente de agrupaciones ecologistas como Adega, Ecoloxistas en Acción y la Asociación pola Defensa da Ría de Pontevedra– “vienen dadas por el desconocimiento” sobre ella. “Hasta ahora quizá nos ha faltado hacer esa labor didáctica, sobre todo, porque estábamos muy centrados en la definición del proyecto”. Según expone, desde la pastera ya han empezado a contactar con los ayuntamientos vecinos para realizar charlas informativas “con mensajes claros sobre lo que vamos a hacer”.
La captación de agua del embalse de Portodemouros es uno de los principales puntos de fricción con los opositores al proyecto. Dapena aclara que los 46.000 metros cúbicos de agua al día es la solicitud de la concesión administrativa. “Es el caudal máximo que se podría llegar a bombear considerando la fase actual y futuras ampliaciones de la fábrica para aumentar capacidad e incorporar nuevos procesos como el reciclaje de textil”.
“Es muy importante aclarar que no consumimos agua, sino que usamos agua”, expone. En la primera fase está previsto captar del embalse unos 20.000 metros cúbicos diarios que, una vez empleados en el proceso productivo, serán devueltos prácticamente en su totalidad al río una vez sean “depurados con tecnologías de muy alta eficiencia (básicamente ozono y oxígeno)”.
Altri, sin sanciones por vertidos
En la entrevista, Bruno Dapena también aclara las informaciones de las plataformas contrarias al proyecto que señalan que la compañía fue sancionada en Portugal por vertidos.
Según explica, hubo un vertido en las proximidades de una de las plantas lusas del que, en un primer momento, se culpó a la pastera. Sin embargo, la compañía “demostró en los tribunales que el incidente no tuvo nada que ver con estas instalaciones ni con su actividad productiva, por lo que se retiró la sanción”.
Preguntado sobre si la actividad de la plana supondrá un incremento del cultivo de eucalipto en la comarca Dapena sostiene que la previsión es consumir alrededor de 1,2 millones de metros cúbicos de madera al año, una cifra que “no supone promover nuevas plantaciones” ya que hay capacidad de abastecimiento del excedente que en la actualidad se destina a otros mercados. “Es una nueva oportunidad para los productores de proximidad”.