Orsted, socia de Repsol en Langosteira, anuncia su retirada de España y Portugal
La firma danesa ha anunciado un plan de ajuste que la incluye venta de activos, el despido de 800 empleados, la suspensión temporal de su dividendo y su salida de mercados como España, Portugal o Noruega
Nueva etapa para Orsted. La compañía danesa de energías renovables ha anunciado un plan de choque que se saldará con cancelación de proyectos, venta de activos, suspensión del dividendo durante tres años y un recorte en sus objetivos tanto de inversión como de capacidad.
La firma efectúa este movimiento ante la previsión por parte de los analistas de que despidió su ejercicio fiscal 2023 con unos números rojos superiores a los 3.000 millones de euros. Es por ello que Orsted, que ya en diciembre anunció su decisión de detener el desarrollo de dos proyectos eólicos marinos en Estados Unidos, ha dado una nueva vuelta de tuerca a su plan de ajuste.
Según ha desvelado la compañía escandinava este miércoles, su previsión pasa por dar salida a un total de 800 empleados y a abandonar los mercados de Portugal, Noruega y España. El movimiento se produce menos de un año después de que la compañía cerrase precisamente una alianza con Repsol para invertir en Punta Langosteira.
Ambas empresas suscribieron un convenio con la Autoridad Portuaria de A Coruña que contempla «el desarrollo, construcción, operación y mantenimiento de futuros proyectos de eólica marina flotante» a través del uso «temporal» de infraestructuras del puerto exterior de A Coruña durante las fases de montaje e integración de los aerogeneradores, bases flotantes, subestaciones, cableado, sistemas de amarre y «demás equipamiento necesario para el desarrollo del proyecto».
Los planes de Orsted quedan ahora en el alambre después de anunciar este paquete de medidas de ajuste que contemplan una rebaja en su objetivo de capacidad de generación. La empresa danesa calculaba tener un total de 50 gigavatios en operación a final de la década, una cifra que ha rebajado hasta la horquilla de 35-38 gigavatios actuales. La firma también anunció que recortaría sus gastos de capital (inversiones) de cara a los tres próximos años en unos 5.000 millones de euros y que llevará a cabo un plan de venta de activos para recaudar unos 15.000 millones de euros.