Morgan Stanley y la dueña de Lidl, los gigantes tras las empresas del conflicto de basuras en A Coruña

A Coruña trata de sacar la basura que se acumula en sus calles debido a la huelga iniciada el pasado 24 de junio, hace un mes, en PreZero, la compañía que explota el servicio de recogida. La misma fue promovida por la organización sindical mayoritaria en el comité, el Sindicato de Trabajadores de la Limpieza (STL), argumentando “despidos injustificados, externalización e incumplimiento del convenio”. Esta semana, con la emergencia sanitaria ya declarada, el Concello da Coruña encargó a Valoriza el refuerzo de la recogida. La compañía, que este jueves comenzó a prestar servicio escoltada por las fuerzas de seguridad locales, mantendrá la actividad “mientras dure la actual situación”.

Para entender los entresijos del conflicto que ha convertido muchas de las calles de A Coruña en auténticos vertederos hay que tener en cuenta que esta huelga y la tensión entre empresa y plantilla se produce en medio de una investigación judicial por corrupción que tiene en su epicentro al STL y a su líder, Miguel Ángel Sánchez, además de a la propia adjudicataria. Básicamente, el juzgado de instrucción número 6 de A Coruña investiga desde hace casi dos años las supuestas mordidas que habrían cobrado los líderes de la central sindical por dar empleos a dedo debido al poder que les otorgaban las propias empresas adjudicatarias de los servicios de limpieza. Y es que en la ciudad herculina se producía una inusual situación, ya que el propio cabecilla del sindicato controlaba la contratación a través de dos empresas montadas a tal efecto, Imprego e Inusvalia.

Sánchez ha sido imputado, junto a su mujer y otros dirigentes del STL, por delitos de blanqueo, estafa, tenencia ilícita de armas y corrupción entre particulares. No son pocas las voces que defienden que tras el actual conflicto no está más que la lucha por el control de la contratación de personal eventual, una de las cuestiones que se investiga judicialmente.

De Ferrovial a Schwarz

Pero, más allá de esto, el mantenido conflicto también ha puesto el foco sobre el nombre de las empresas adjudicatarias de estas millonarias concesiones. En el caso coruñés, tanto PreZero como Valoriza experimentaron cambios de calado en los últimos años. La primera está en manos del grupo alemán Schwarz, dueña de los supermercado Lidl. La segunda cambió de dueño precisamente el año pasado, cuando Sacyr vendió a Morgan Stanley.

En agosto de 2019, el Ayuntamiento coruñés adjudicó el contrato de recogida de residuos a una UTE liderada por FCC por algo más de 14 millones de euros al ejercicio y una duración de ocho años. No obstante, el contrato acabó, de nuevo, en manos de Cespa debido a una resolución del Tribunal de Contratación Pública de Galicia, que descartó la anterior opción. En aquella altura, la firma estaba en manos de Ferrovial, el gigante de Rafael del Pino.

No obstante, en diciembre de 2021, Ferrovial vendió su negocio de Medio Ambiente en España y Portugal al grupo alemán Schwarz, que pasó a integrarlo en su división PreZero. El precio de las acciones vendidas ascendió a 1.032 millones de euros y la operación generó a los de Del Pino unas plusvalías de 330 millones de euros.

El hombre más rico de Alemania

PreZero pertenece al imperio de Dieter Schwarz, el hombre más rico de Alemania y la fortuna número 43 del mundo según Forbes, con un patrimonio de unos 35.000 millones de euros. El suyo es un imperio basado fundamentalmente en la distribución alimentaria, ya que cuenta no solo con la conocida cadena de supermercados Lidl, sino con los hipermercados alemanes Kaufland. Además, de su grupo inversor cuelgan también PreZero, Schwarz Produktion y Schwarz Digits.

A Coruña es una pieza muy pequeña dentro de su imperio, que el pasado año generó unos ingresos de 167.200 millones de euros en todas sus unidades de negocio, un 8,5% más, siendo las marcas de supermercados las que tiraron del carro. Según ellos mismos indicaron, PreZero aumentó significativamente el número de ayuntamientos que requirieron sus servicios para la gestión de residuos. No obstante, la caída de los precios de algunos materiales reciclables hizo que los ingresos disminuyesen casi un 6%, hasta los 3.700 millones de euros.

El negocio que Schwarz adquirió en A Coruña le salió rana ya que, en la actualidad PreZero y FCC, concesionaria en este caso del servicio de limpieza viaria, también están siendo investigadas en el marco del caso STL. La Fiscalía, sin ir más lejos, sostiene que, cuando menos, «fueron cooperadoras necesarias en la trama», al dejar las contrataciones en manos de los dirigentes del STL. Además, el TXSG anuló el septiembre del año pasado el contrato de recogida de basuras en su momento adjudicado a Cespa debido a una demanda de Valoriza, con lo que, previsiblemente, el consistorio tendrá que volver a repetir el concurso.

De Sacyr a Morgan Stanley

También Valoriza, la firma que ahora está intentando recoger la basura de las calles coruñesas, acaba de experimentar notables cambios. La compañía, que ha pretendido el contrato de basuras de la ciudad, estaba en manos del gigante Sacyr, que el año pasado completó la venta del 100% de su filial de servicios medioambientales a Morgan Stanley. El movimiento entroncó con la decisión del grupo de centrarse en el negocio de la concesión de infraestructuras y reducir la deuda.

El precio de las acciones vendidas ascendió a 420 millones de euros y valoró la empresa en unos 734 millones de euros. En 2022, Valoriza alcanzó un ebitda, resultado bruto de explotación de 80 millones de euros.

Según su último Estado de Información no Financiera (EINF), entre noviembre y diciembre de 2023, periodo dentro del año fiscal en el que pasó a formar parte de Morgan Stanley, la firma se anotó unas pérdidas de 9,7 millones de euros.