Los trabajadores de Navantia deciden parar los trabajos de las fragatas de Defensa
La plantilla de los astilleros de Ferrol aprueba en referéndum y en contra de la opinión del comité de empresa que paralizarán los trabajos en aceros de las nuevas fragata F-110 hasta que se firme el convenio colectivo
Los operarios de Navantia en Ferrol han decidido paralizar los trabajos en aceros en la construcción de las nuevas fragatas F-110, el encargo del Ministerio de Defensa que sirvió para vehicular la renovación tecnológica y de personal del astillero. La medida, que el comité de empresa se oponía a adoptar, se aprobó en un referéndum con voto en urna y estará vigente mientras no se firme el convenio colectivo.
El presidente del comité de empresa, Carlos Díaz (MAS), una vez finalizado el proceso de votación, explicó la propuesta de la mayoría del comité consistía en «mantener cierta presión en los trabajos en acero, cierta presión en los programas, pero siempre teniendo en cuenta las necesidades y favoreciendo el empleo en la industria auxiliar, con objetivo de evitar despidos» y expedientes de regulación. «Como no puede ser de otra manera, asumimos la decisión de los trabajadores, trasladamos a la dirección al resultado, en donde se ha decidido no permitir que se haga ningún movimiento de bloques, ningún trabajo en acero hasta que se asigne el convenio«, aseveró.
Esta medida había sido propuesta el pasado lunes en asamblea por el sindicato CGT, y ahora ha sido ratificada por la mayoría de trabajadores.
Dos años de espera por el convenio
Díaz ha detallado que la parte social continua «con la negociación del convenio colectivo, con el compromiso del calendario que se tenía en la comisión negociadora con la dirección de la empresa, de tratar de cerrar este convenio el día 30 de noviembre«.
«La semana que viene nos convocaron ya para tres días en jornada intensa, con el objetivo de tratar de cerrar un preacuerdo, y poder llevar a los astilleros para debatir con los trabajadores», explica. Recuerda que llevan «dos años y medio sin convenio colectivo», por ello «la gente necesita, de una vez por todas, que se ponga todo sobre la mesa y que se cierre esta negociación».
A las 22,00 horas de este miércoles se inició un paro de 24 horas en todos los centros de trabajo del país, que finalizará a esa misma hora de este jueves, 21 de noviembre. Carlos Díaz apunta que esta medida de presión fue aprobada el lunes en asamblea, y consintió en modificar una concentración que tenían prevista en Madrid, ante el Ministerio de Hacienda, y una reunión con la responsable de está área, María Jesús Montero, por esta otra medida de protesta. El objetivo es el mismo, «presionar también a la dirección y al Gobierno para que ponga toda carne en el asador para desbloquear de una vez por todas esas negociaciones de convenio».