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Las fábricas en ERTE de Ferroglobe concentran casi el 40% de su producción mundial
La dueña de Ferroglobe cifra en 422.000 toneladas su capacidad de producción a través tanto de las plantas de Sabón, Boo y Monzón como del complejo de Xeal en Cee-Dumbría, con el que tiene un acuerdo para el suministro de materias primas pese a su venta hace cuatro años
Ferroglobe vuelve a centrar su ajuste de producción sobre sus factorías españolas. La dirección de la compañía alcanzó la semana pasada un acuerdo con los sindicatos para prorrogar durante seis meses más el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) que lleva activo desde comienzos de este año.
Ambas partes han encontrado un punto de encuentro que rebaja el grado de posible afectación de este ERTE desde el 75% actual hasta el 55% y que marca el mes de junio como fecha final para una medida que Ferroglobe, dueña de Ferroatlántica, planteó en su momento para todo el año.
Este ERTE impacta, de esta manera, sobre unas plantas españolas que juegan un papel clave en la red de producción de la multinacional que preside Javier López Madrid. La crisis energética y los escasos avances hasta el momento con la firma de contratos de suministro a largo plazo (ppa) -tan solo ha trascendido la firma de uno con la firma ourensana Adelanta Corporación– ha forzado un nuevo ajuste que pone en jaque el 35,3% de su producción a nivel global.
El mapa de Ferroglobe
Y es que, según detallaba la compañía en una reciente presentación ante inversores, su capacidad de producción en España se sitúa en las 421.500 toneladas sobre el total de 1,19 millones que el grupo despliega en todo el mundo. A través de sus factorías tanto de Sabón como Monzón (Aragón) y Boo (Cantabria), Ferroatlántica tiene capacidad para producir 43.000 toneladas de silicio metal (principalmente en Sabón), así como 71.000 toneladas de aleaciones de ferrosilicio y otras 307.500 toneladas de aleaciones de manganeso.
Dentro de esta última rúbrica sobresale, según Ferroglobe, un centro de producción del que se desprendió en 2019 y que fue explotado por el fondo Sixth Street Partners antes de su venta al grupo checo Energo-Pro. Se trata del complejo de Cee-Dumbría, que cuenta con capacidad de producción de más de 175.000 toneladas de ferrosilicio y aleaciones de manganeso.
Ferroglobe hace referencia a lo que denomina tolling agreement con las fábricas de Cee y Dumbría. Bajo esta fórmula se a engloba a aquellos tipos de contratos por los cuales ambas partes pactan un suministro de materias primas para que estas sean transformadas en una factoría. Según vienen denunciando los sindicatos de Xeal en los últimos, Ferroatlántica sería el proveedor de materias primas y, a su vez, el comprador de buena parte de la producción de este complejo de Cee-Dumbría sobre el que gravitan diez minicentrales hidráulicas en los ríos Xallas y Grande.
Ferroglobe tiene en España el 35,3% de su capacidad de producción global, lo que le convierte en su el principal pieza dentro del tablero de fábricas a nivel mundial. La compañía, que en el año 2019 trasladó su sede de Londres a Madrid como consecuencia del Brexit, despliega otros seis centros productivos en Francia. Estos se ubican en Dunkerque, Anglefort, Laudun, Les Clavaux, Montricher y Pierrefite y cuentan con una capacidad de producción conjunta de 328.000 toneladas.
También en Europa, Ferroglobe cuenta con 114.000 toneladas de capacidad de producción en Noruega (a través de sus factorías de Lista y Mo Rana, que en el pasado recibieron carga de trabajo procedente de España como consecuencia de los elevados precios de la electricidad). Fuera del Viejo Continente, Ferroglobe concentra en en Norteamérica un total de 185.160 toneladas de capacidad de producción, una cifra que supera las 117.000 toneladas de Sudáfrica tras la reapertura de su centro de trabajo de Polokwane y las 26.000 de Sudamérica.