José María Castellano, exvicepresidente de Inditex, deja el puesto a su hijo en la socimi Millenium
El también expresidente de Ono y Novagalicia presenta su renuncia como consejero de la inmobiliaria hotelera y es reemplazado por su hijo Pablo, que estará en la comisión de nombramientos y retribuciones y en la auditoría de la cotizada
José María Castellano, histórico directivo de Inditex y expresidente de Ono y Novagalicia, ha presentado su renuncia como consejero de Millenium Hospitality Real Estate, la socimi hotelera en la que entró como consejero en 2019 y en la que controla un 3,8% del capital. La inmobiliaria comunicó al BME Growth la renuncia del exvicepresidente de la multinacional de Amancio Ortega, agradeciendo «encarecidamente los servicios prestados» y mostrando su aprobación a la «gestión realizada» por el economista gallego.
Lo reemplazará en todos los cargos Pablo Castellano Vázquez, su hijo, que pasa a ser consejero de la socimi y a ocupar también los asientos que tenía su padre como vocal en la comisión de nombramientos y retribuciones y en la comisión de auditoría y control. Lo hará en representación de Alazady España, una de las sociedades de inversión de la familia.
Millenium, Greenalia y el grupo familiar
Pablo Castellano, de hecho, es presidente de Alazady desde 2015 y también de la otra pata de la principal pata de la family office, Nakadama, desde ese mismo ejercicio. También es apoderado de Pasoni Inversiones, la sociedad anónima heredera de la antigua sicav Carivega, que los Castellano decidieron transformar tras el cambio de normativa para acabar con los denominados mariachis.
Como su padre, Pablo Castellano tiene hoja de servicios en el sector textil, pues fue presidente de Suburban Desing y director de Niki Bosch. Ahora ocupa también un puesto de consejero en el grupo gallego de renovables Greenalia, donde su padre es presidente y accionista con un 6% del capital.
Querella contra el CEO cesado
El relevo llega en un momento convulso a nivel interno para Millenium y antes de su salto al continuo, tarea en la que Castellano debía jugar un papel clave. La socimi, que tiene como accionista de control al fondo Castlelake, cesó en enero a su fundador y, hasta entonces, consejero delegado, Javier Illán.
Esta semana anunció además que ha presentado una querella contra Illán por cuatro presuntos delitos de administración desleal, estafa, apropiación indebida y falsedad documental (puede consultar aquí el documento). Las irregularidades habrían sido detectadas, según trasladó la empresa, por un informe forensic de KPMG y estarían vinculadas a operaciones inmobiliarias en Cádiz y Bilbao.