La concesionaria del Hospital Álvaro Cunqueiro dispara ganancias un 140% tras firmar la paz con el Sergas

Un informe del Consello de Contas ha puesto en el centro del debate político en Galicia el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo. Con él, la Xunta de Alberto Núñez Feijóo aplicó un modelo que nunca se había usado antes en la comunidad, el de la colaboración público-privada. El Sergas encargó a una empresa que construyese el centro sanitario y, a cambio, se lo pagaría en los 20 años siguientes en los que también se ocuparía de gestionar servicios no clínicos y otras explotaciones comerciales. Ahora, el órgano fiscalizador concluye que habría sido más eficiente licitar la obra y los servicios del centro por separado y no de forma conjunta, como se hizo. Y pone cifras millonarias, ya que asegura que esto habría supuesto un ahorro de más de 470 millones de euros, IVA incluido.

El informe ha levantado toda una polvareda, toda vez que la oposición acostumbra a criticar a la Xunta por su modelo sanitario. El Gobierno gallego defiende la opción contractual escogida, asegurando que la misma permitió reducir el plazo de ejecución, que se habría demorado hasta 15 años según sus cálculos, mientras que el BNG denuncia “una estafa gigantesca” escondida tras “un modelo privatizador” de la sanidad pública y un “entramado de irregularidades”. El PSdeG, por su parte, urge reconsiderar la gestión y la financiación del hospital y pone el foco en la figura de Alberto Núñez Feijóo, culpándolo de un “sobrecoste millonario” y cuestionando su capacidad de gestión.

Y, en mitad de este escenario, el Registro Mercantil revela los números correspondientes al ejercicio 2023 de la Sociedade Concesionaria Novo Hospital de Vigo, una de las grandes proveedoras del Sergas. El pasado ejercicio, y tras decidir poner fin a años de batallas judiciales con el Servizo Galego de Saúde, su cuenta de resultados se enderezó, al mejorar su beneficio neto en un 140% y pasar de los 585.000 euros anotados en 2022 a 1,42 millones de euros. En todo caso, la cifra no alcanza la conseguida en 2021, cuando contabilizó unas ganancias de 3,4 millones de euros.

Accionistas

La sociedad concesionaria del Cunqueiro tiene un accionariado atomizado y liderado, desde 2020, por el fondo francés Meridiam, que se hizo con un ramillete de concesiones en toda España que adquirió a Acciona por un valor conjunto de 484 millones de euros. A través de la sociedad Infra Invest Iberia, es el máximo accionista, con una participación de un 30%. El luxemburgués River Rock ostenta un 25% con Mirtexo ITG. Tras él se encuentra Puentes y Calzadas, con un 23,3%. La sociedad Bens Patricios, asociada al presidente de la constructora, retiene un 5% mientras que Veolia Servicios Norte posee un paquete de un 16,6%.

Los accionistas de la compañía no percibieron el pasado año ningún dividendo con cargo a los resultados de 2022 ni en sus cuentas se hace mención a ningún reparto este ejercicio. No obstante, hasta el año pasado era la tónica habitual. En 2020 se abonaron 2,5 millones de euros y en 2021 4,8 millones con cargo a reservas.

Ingresos anuales del Sergas

Con unos activos de 286 millones de euros y un patrimonio neto de 48,2 millones de euros, el resultado de explotación, el propio de la actividad de la compañía, ascendió a 13,4 millones de euros, en línea con el año precedente, en el que llegó a los 13,7 millones de euros.

Pero, ¿Cuánto ingresa esta sociedad? Cada ejercicio, la concesionaria recibe una “cantidad máxima anual ofertada” por la explotación de los servicios no clínicos (restauración, lavandería, limpieza, mantenimiento de electromedicina, mantenimiento general, desinfección, transporte interno y externo, seguridad, suministros y gestión energética, agua, mantenimiento de equipos de impresión y conservación de viales y jardines) que se marcó en 56,3 millones de euros más IVA en el año 2010. Se acordó entonces que se actualizaría, eso sí, en base al IPC. Según la memoria de la concesionaria, en 2023, “la sociedad devengó una cantidad máxima anual de 68,5 millones de euros, IVA no incluido, frente a los 67,3 millones del ejercicio anterior. Es decir, más de 80 millones de euros.

Adiós a los litigios

Históricamente, concesionaria y Sergas pleitearon en los tribunales por distintas cuestiones relacionadas con su adjudicación, que iban desde la actualización del canon anual hasta el pago de los impuestos del IBI, los precios de los menús de la cafetería o la actualización del IPC. Sin embargo, el año pasado llegó la fumata blanca, o eso parece.

“Durante el ejercicio 2023, la sociedad ha trabajado conjuntamente con la administración para llegar a acuerdos en todas las cuestiones abiertas, consiguiendo cerrar discrepancias anteriores, así como disminuir el número de incidencias y mejorar las encuestas de satisfacción con usuarios y profesionales”, exponen en la memoria que acompaña a su balance. “La sociedad concesionaria tiene el firme objetivo de que las relaciones con la administración continúen siendo de colaboración diario y trabajando conjuntamente”, dice, para añadir que “mantuvo frente a la Dirección de Recursos Económicos de la Consellería de Sanidade discrepancias puntuales en relación con determinadas cuestiones vinculadas a la ejecución de contrato de concesión, que dieron ligar a la presentación de las oportunas reclamaciones, que prácticamente han desaparecido en su totaliad salvo tres cuestiones que se encuentran pendientes de los correspondientes recursos contencioso-administrativos”.