Freno judicial a la primera mina de coltán de Galicia
El TSXG ha suspendido cautelarmente la resolución en la que la Xunta autorizaba el proyecto de Strategic Minerals para operar el yacimiento de A Penouta
Imagen de la Mina de Penouta, donde Strategic Minerals extrae coltán
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Golpe del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) a la primera mina gallega de coltán. La sala de lo contencioso del TSXG ha decidido suspender cautelarmente la resolución mediante la cual la Xunta de Galicia autorizaba el proyecto de Strategic Minerals Spain para explotar este yacimiento en A Penouta (Viana do Bolo), que alberga reservas de estaño, tantalio y columbita.
El movimiento se produce después de las denuncias presentadas por Ecoloxistas en Acción. La organización se ha pronunciado en estos últimos años en contra de este yacimiento al entender que la iniciativa lleva aparejada el vertido de residuos en los riegos de la zona y que afectan al LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) de Pena Trevinca.
“Esperamos que el Gobierno gallego cumpla ya con el dictamen del auto judicial. De no hacerlo, iniciaremos acciones ejecutorias y reclamaremos la responsabilidad personal de los funcionarios y altos cargos por los impactos generados», ha declarado Cristóbal López, portavoz de Ecoloxistas en Acción.
A través de un comunicado, la organización ecologista asegura que la compañía ha recibido diferentes sanciones en los últimos años «por denuncias del servicio municipal de aguas, de la población afectada y también de los ecologistas», si bien tacha de «sorprendente» que las analíticas realizadas por la Confederación Hidrográfica omitiesen los parámetros arsénico, mercurio, cadmio y plomo, permitiendo que la empresa consiguiese evitar sanciones mucho más altas.
Acelerón en la producción
Strategic Minerals había recibido, además, un nuevo impulso de la Xunta de Galicia en verano de 2022. Fue entonces cuando autorizó una explotación a cielo abierto en la sección C de este yacimiento. Este empujón ha venido acompañado de un fuerte rebote en la producción, que se elevó un 158%, hasta alcanzar las 134 toneladas de concentrados en los tres primeros meses del año.
Además, su cifra de negocio repuntó desde los 1,1 hasta los 2,9 millones de euros en los últimos doce meses, algo que, no obstante, no ha sido suficiente para sacar a la empresa de números rojos. En concreto, su ebitda (beneficio bruto de explotación) arrojó un resultado negativo por valor de 1,05 millones de euros, lo que supone un descenso respecto a los 1,3 millones registrados en el primer trimestre de 2022.
