Actualizado
Florentino Pérez, Acciona y San José reinan en la obra pública de la Xunta en 2023
Las empresas del grupo ACS obtienen más de 50 millones en contratos por la ampliación del Hospital Clínico de Santiago, en UTE con San José, y la AG-53; Acciona construirá la nueva sede de la Xunta y Copasa el centro de protonterapia de Santiago
ACS, el grupo que preside Florentino Pérez, se ha colocado de nuevo entre los grandes adjudicatarios de obra pública de la Xunta en 2023. Le han bastado dos grandes contratos ganados por filiales de la compañía. Dragados se hizo con la ampliación del Hospital Clínico Universitario de Santiago, un concurso de 70,5 millones en el que concurrió en alianza con San José y Construcciones Ramírez. Vías y Construcciones, otra filial de la compañía del también presidente del Real Madrid, ganó la licitación para prolongar la autovía AG-59 por 27,1 millones, en este caso, en alianza con la gallega Marconsa. La empresa de ACS controla el 85% de la UTE, lo que equivale a 23 millones del total.
El encargo más importante, sin embargo, es la infraestructura sanitaria compostelana, el contrato más voluminoso licitado por la Axencia Galega de Infraestruturas durante el ejercicio. Dragados controla un 40% de la alianza, al igual que San José, por lo que le corresponden 28,2 millones a cada uno. De esta manera, las empresas del grupo de Florentino Pérez suman algo más de 51 millones en solo dos licitaciones resueltas por el Gobierno gallego en 2023.
San José se hace fuerte entre los grupos gallegos
El contrato del hospital de Santiago también sitúa a la constructora de Jacinto Rey entre los grandes adjudicatarios de obra pública de la Xunta del año, ocupando el primer puesto entre las gallegas. Cabe recordar que otra alianza del grupo de origen pontevedrés con empresas de ACS, Dragados y Tecsa, ha obtenido la mayor puntuación en el concurso para construir la nueva estación pasante de Puerta de Atocha, presupuestada en 514 millones por Adif. En Galicia, San José consiguió hacerse también con el Centro de Artes Dixitais de Galicia, un proyecto de 4,5 millones que adaptará una superficie soterrada ya existente y en desuso de la Cidade da Cultura de Santiago. En un plazo de 24 meses construirá el primer centro dedicado a las artes digitales en Galicia, que ocupará un espacio de 4.400 metros cuadrados.
Con estos dos contratos supera a otra de las grandes constructoras gallegas, Copasa, que obtuvo su mayor adjudicación en la obra pública de la Xunta de mano del Sergas. La compañía ourensana se encargará del centro de protonterapia de Santiago que albergará el acelerador de protones donado por la Fundación Amancio Ortega. La oferta de Copasa fue de 19,8 millones, en un concurso del que fueron excluidos Ferrovial y Acciona al considerar su oferta anormalmente baja.
Proyecto para el Centro de Artes Dixitais de Galicia, que se construirá en un plazo máximo de 24 meses
Puentes cierra el año un menor volumen adjudicado que San José y Copasa, pero con otro gran contrato en el bolsillo. Lo obtuvo en una UTE junto a Francisco Gómez, una de las promotoras de la reapertura de la mina de Touro, y Vázquez y Reino. La alianza ganó los accesos nuevo Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña por 22 millones. También en el marco del nuevo hospital herculino, FCC y Taboada y Ramos se quedaron la torre polivalente por 33 millones, un contrato adjudicado este mismo diciembre. La constructora de Lalín ya ganó en 2022 una de las mayores obras de la Xunta en el ejercicio, la estación de autobuses intermodal de A Coruña. En aquel caso fue en alianza con Comsa y por un precio de 37,8 millones.
Acciona, por detrás de Florentino
Otra de las dominadoras tradicionales en la obra pública gallega es Acciona. En 2023, sin embargo, se quedó por detrás de las filiales del grupo ACS entre los grandes contratistas de la Xunta. Eso sí, al grupo de la familia Entrecanales le bastó un solo contrato para alcanzar los 32,5 millones en obras. Lo obtuvo en mayo para comenzar a construir la Cidade de San Caetano, el centro administrativo donde la Xunta pretende concentrar servicios que tiene repartidos por distintos puntos de Santiago. El proyecto se ubica en la antigua estación de autobuses de la ciudad y, por tanto, frente a la sede de la Xunta en San Caetano.
La clase media se refuerza
Entre las constructoras de menor tamaño cabe destacar el año de Oreco Balgón, del grupo que dirige el ourensano Máximino González Balboa. La Consellería de Infraestruturas le encargó el Centro de Ciberseguridade de Galicia, ubicado en el polígono de San Cibrao das Viñas, por 5,8 millones, actuación que se suma al edificio de Medio Rural en Lalín, una obra de 3,7 millones.
La firma coruñesa Ogmios obtuvo también un elevado volumen de contratación, superando los 10 millones en obras; mientras que la ourensana Extraco consiguió dos actuaciones importantes, una de 13,9 millones y otra de 6,7 millones concurriendo en UTE con Orega y Prace, respectivamente. Además, logró este año el contrato para la senda entre Os Remedios y Expourense por el paseo del Barbaña, en la cidade das Burgas, por 3,5 millones.