Los jefes de Ferroatlántica, con López Madrid al frente, se aplican las subidas salariales que niegan a la plantilla

La cúpula de Ferroglobe se sube el sueldo. La matriz de Ferroatlántica celebra este martes su junta general de accionistas, una cita a la que llega inmersa en pérdidas, con una caída del 17,5% en bolsa en lo que va de año y en medio de un cisma laboral con su plantilla en España, que amenaza con la convocatoria de huelga para finales de este mes.

Pese a ello, uno de los puntos del día de esta junta general de accionistas que tendrá lugar en Londres girará en torno a un alza en la retribución fija de los dos primeras espadas de la compañía. Se trata de su presidente, Javier López Madrid (yerno del máximo accionista de la compañía, Juan Miguel Villar Mir), y de su consejero delegado, el italiano Marco Levi.

«En 2024 la comisión de retribuciones y el consejo de administración aprobaron un incremento en el salario base del presidente ejecutivo, Javier López Madrid, en 18.000 libras (un 3%) anuales y un incremento en el salario base del CEO, Marco Levi, en 25.000 euros (un 3%) anuales que se hace efectivo desde el 1 de abril de 2024″, destaca la firma en la documentación que acompaña a esta junta general de accionistas.

Los números de López Madrid y Levi

«En ambos casos, los aumentos estuvieron en línea con los incrementos para el resto de la plantilla y congruentes con las prácticas de mercado de la industria en la que opera la compañía», justifica Ferroglobe. De esta forma, el salario base de Javier López Madrid se encarama ahora hasta los 717.510 euros mientras que el de Marco Levi hace lo propio hasta los 816.000 euros.

A estas cantidades se suman beneficios en forma de seguros que en 2023 supusieron 183.000 euros para Javier López Madrid y 38.000 euros para Marco Levi. Los dos máximos ejecutivos de Ferroglobe también percibieron 139.000 y 164.000 euros, respectivamente, por las aportaciones a sus planes de pensiones.

De este modo, la retribución fija en ambos casos se situó ligeramente por encima de los 1,02 millones de euros, unas cifras a las que hay que sumar las retribuciones variables. Estas supusieron una inyección de 527.000 euros para Javier López Madrid y 624.000 euros para Marco Levi.

Ambos ejecutivos vieron recortadas sus percepciones por esta vía hasta casi la mitad respecto a 2022. No en vano, Ferroglobe venía de cerrar su ejercicio fiscal 2022 con los mejores resultados de su historia tras cosechar un beneficio neto por valor de 429 millones de euros, una cantidad que se recortó hasta la quinta parte (81,6 millones de euros) en 2023.

Así, el sueldo total de Javier López Madrid retrocedió desde los 1.86 millones de euros de 2022 hasta los 1,55 millones en 2023 pese al incremento en la parte fija. Dinámica idéntica siguió Marco Levi, que vio recortados sus emolumentos desde los 2,1 millones de euros hasta los 1,65 millones.

Cisma por los sueldos de la plantilla

De esta forma, Javier López Madrid y Marco Levi blindarán una subida salarial del 3% en su remuneración fija mientras la compañía niega lo propio a su plantilla en España. A través de un comunicado conjunto, los sindicatos UGT FICA, CIG, CC OO. USO y S.U. han abierto la puerta a la convocatoria de una jornada de huelga a finales de junio ante la falta de avances en las negociaciones con la dirección de la compañía.

Ambas partes acumulan casi 15 reuniones en el marco de la mesa negociadora creada en enero de 2023. Sin embargo, estas conversaciones siguen sin fructificar en ningún tipo de acuerdo en materia salarial. Los sindicatos exigen un alza salarial que permita compensar la pérdida de poder adquisitivo que se registró en 2023 (el IPC se situó en el 3,1%) y que está teniendo continuidad en este 2024. Pero esta postura se topa, según los representantes de los trabajadores, con la oposición de la dirección de la compañía, que se cierra a abordar estas alzas salariales para su plantilla de las fábricas de Sabón (Arteixo), Boo (Cantabria) y Monzón (Aragón).

En este sentido, la compañía asegura en la documentación que acompaña a la convocatoria de su junta general de accionistas que él escenario de mercado seguirá siendo «desafiante» en 2024, aunque vislumbra brotes verdes. «Hemos visto a nuestros clientes reponer existencias y cierta recuperación de precios en la primera parte del año«, destaca la firma que apunta a las interrupciones del transporte global en el Canal de Suez como una de las posibles causas.

«Creemos que los mercados europeos para nuestros productos alcanzaron su punto más bajo en septiembre de 2023 y han mostrado una mejora constante de los precios desde entonces. El mercado estadounidense tardó más en recuperarse y su punto más bajo probablemente se produjo en diciembre de 2023 con modestos apreciación de precios en la primera parte de 2024», recalca la compañía.

«Estamos en una excelente posición con nuestra huella diversificada para aprovechar el crecimiento de la demanda global en los próximos años a medida que un número cada vez mayor de países aceleran su transición verde a través de la energía solar o de vehículos eléctricos que utilizan compuesto de silicio avanzado o tecnología rica en silicio para las baterías«, reivindica Ferroglobe.

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