Fernando Romero y Laurion inyectan 70 millones en EiDF para arreglar las cuentas antes del cierre

Los dos principales accionistas de EiDF ejecutan un nuevo movimiento antes del cierre del ejercicio. Prosol, la sociedad con la que Fernando Romero controla el 52% del grupo, y Laurion, titular del 12,9% del capital, han inyectado 5,2 millones en la caja de la compañía mediante la concesión de dos préstamos participativos. El presidente de EiDF aporta 4,4 millones de euros, mientras que el segundo accionista de la cotizada pone sobre la mesa otros 800.000 euros de liquidez.

Este movimiento llega un día después de que el grupo con instalaciones en Barro (Pontevedra), aunque mudado a Madrid tras la crisis que mantuvo suspendidas sus acciones durante cuatro meses, anunciara la recompra de las participaciones que IKAV mantenía en alguna SPV y la amortización de la deuda de estas mediante un desembolso de 15 millones. La mayoría de las operaciones que ha realizado EiDF desde su vuelta al parqué, sumido en una profunda crisis de reputación, han ido encaminadas a reducir la deuda a corto plazo y reforzar los fondos propios de la compañía con la intención de presentar a cierre de ejercicio un fondo de maniobra positivo que evite que el auditor, PwC, vuelva a cuestionar su viabilidad.

Entre Fernando Romero y Laurion, según los datos que ha facilitado EiDF, han rebajado en 19,6 millones la deuda a corto plazo por dos vías. Por un lado, con la amortización anticipada de pagarés por valor de 11 millones y, por otro, con la cancelación de un préstamo de 8,5 millones con Prosol. Los dos primeros accionistas han protagonizado los movimientos clave para reflotar los números en una suerte de rescate desde dentro y por etapas. Y tiene cifras.

Las inyecciones de liquidez

A lo largo del ejercicio, según la compañía, Prosol ha inyectado 25 millones de liquidez, mientras que Laurion ha aportado 3,8 millones. A esto hay que sumar la inversión de la firma con sede en Luxemburgo para convertirse en el segundo accionista del grupo y que ascendió a 40 millones. Entre los dos han aportado 68,8 millones a la compañía para enderezar el rumbo después de perder más del 80% de su valor en bolsa. Los movimientos anunciados en la recta final del ejercicio han permitido al grupo repuntar en el parqué, con una revalorización de más del 30% en la segunda quincena de diciembre.

En un comunicado, EiDF asegura que mantendrá durante el ejercicio 2024 el rumbo emprendido y que ya está estudiando nuevas operaciones para poner en valor su pipeline tanto de proyectos de generación como de autoconsumo industrial, con la intención de volver a resultados y volumen de negocio previos a la crisis de este ejercicio.