Eurobattery mira a Bruselas para acelerar los permisos de la primera mina gallega para el coche eléctrico
La compañía sueca, promotora del proyecto Corcel en Santa Comba, celebra la votación del Parlamento Europeo en la que se insta a los estados miembros a agilizar la tramitación de minas con materias primas clave como el níquel o el cobalto
Eurobattery vaticina un acelerón en la tramitación de su proyecto Corcel. La compañía sueca ha difundido entre sus accionistas un comunicado en el que actualiza la situación de las dos minas que proyecta en suelo europeo. Se trata del yacimiento finés de Hautalampi y de la iniciativa Corcel, ubicada en el concello de Santa Comba.
Esta última alberga, según los estudios preliminares efectuados por las empresas, unas reservas de níquel valoradas en 114 millones de euros “solo en una pequeña parte del proyecto Castriz». Este metal ha sido incluido en la última Critical Materials Raw Act, que ha sido revisada en 2023. En este listado, la Comisión Europea identifica materias primas claves para el desarrollo económico y la transición energética y busca dar un impulso a proyectos que giren en torno a su aprovechamiento.
El objetivo es reducir la dependencia que el Viejo Continente guarda en esta materia respecto a países asiáticos y blindar así el suministro de materias primas que se perfilan como claves para las últimas décadas. En la última revisión de la Critical Materials Raw Act se ha incluido también el cobre y se mantiene el cobalto. Estos dos últimos metales figuran también en el radar de Eurobattery en su proyecto minero en Galicia.
El proyecto, en manos de la Xunta
Ante este movimiento por parte de la Comisión Europea, la compañía espera una agilización en los plazos para la tramitación de su mina en la parroquia de Castriz. «La compañía sigue esperando una decisión por parte de la Dirección Xeral de Enerxía e Minas«, destaca la firma.
La firma sueca que capitanea Roberto García remitió el proyecto a las autoridades autonómicas en verano de 2022 y sigue a la espera de una decisión final por parte de la Xunta. «Como el Parlamento Europeo votó el 12 de diciembre de 2023 a favor de una ley bajo la Critical Raw Materials Act, la cual entre otras cosas implica que los procesos de obtención de permisos para una mina deben ser acelerados de manera significativa», destaca la firma.
No en vano, el horizonte que dibuja la Unión Europea pasa por que las minas ubicadas en el Viejo Continente sirvan de sustento para el 10% del consumo anual de materias primas estratégicas en suelo comunitario. Es por ello que desde Eurobattery apuntan en su comunicado que «el proceso de obtención de permisos para el proyecto Corcel sea más fácil en un futuro».
El papel clave del níquel
La puesta en marcha de la mina de Corcel situaría a Galicia en el mapa mundial de producción de un níquel cuyos principales productores son Indonesia, Filipinas y Rusia. La demanda de este metal ha ido en aumento en los últimos años como consecuencia de su aplicación para las baterías de los vehículos eléctricos.
El níquel se abre hueco en las baterías NCM (de níquel, cobalto y manganeso) y NCA (de níquel, cobalto y aluminio). A diferencia de las baterías de litio, estas son más grandes y más pesadas y, además, son más fáciles de reparar. Entre sus puntos a favor también figura el ahorro de costes mientras que su principal contra radica en su menor capacidad de almacenamiento de energía respecto a las de litio.