EiDF regresa a Galicia: traslada su sede a Barro nueve meses después de mudarse a Madrid

EiDF Solar ha convocado su junta de accionistas para el próximo 19 de junio y en el punto cuarto del orden del día prevé someter a votación un nuevo cambio de domicilio social. El grupo gallego de renovables establecerá su sede en Pontevedra, en el polígono de Barro donde tiene sus naves, emprendiendo el camino de vuelta respecto a la decisión tomada hace menos de un año.

La compañía aprobó en la junta de accionistas del 21 de septiembre fijar su domicilio social en la calle Orense de Madrid. En aquel momento, EiDF defendió que ubicarse en la capital española le permitiría estar más cerca de los mercados financieros y de la actividad económica donde desarrolla parte de su negocio. Ya tenía oficinas en Madrid y la operativa en Barro no se veía afectada, por lo que el grupo de Fernando Romero dio luz verde a la mudanza.

El cambio de domicilio social se había anunciado semanas antes, junto a un paquete de medidas para revertir el fondo de maniobra negativo que presentaba la compañía, profesionalizar la gestión y reforzar los controles internos, para lo que contó con el apoyo de KPMG. Fueron una respuesta a la suspensión de la cotización por los retrasos en la presentación de las cuentas anuales y a las dudas expresadas por el auditor, PwC, sobre la contabilidad de la compañía.

Ese lance le costó a la empresa especializada en fotovoltaica algo más del 80% de su valor en bolsa, que llegó a superar con holgura los 1.000 millones. La capitalización actual se sitúa en los 410 millones, tras remontar un 11% en lo que va de año.

Vuelta a casa

La mudanza a Madrid recibió un apoyo del 99,9% del capital representado en la pasada junta de accionistas y el próximo 19 de junio se votará la reversión de esa medida en un grupo donde cuatro accionistas controlan el 80% del capital: Fernando Romero (54,6%), Laurion (12,9%), Mass Investments (8,3%) y Memento Gestión (6,63%).

«Se propone adaptar el artículo 3 de los estatutos sociales para que sea el órgano de administración el que pueda trasladar el domicilio social por todo el territorio nacional, al tiempo que se propone trasladar el domicilio social del actual a Barro, Pontevedra», dice la propuesta de resolución recogida en la documentación anexa a la convocatoria de la junta.

El cónclave tendrá lugar tras la presentación de los resultados anuales, en los que registró unas pérdidas de 32,3 millones de euros, casi ocho veces más que en el ejercicio anterior, y un recorte del 38% de los ingresos, que se situaron en los 370 millones. El grupo de renovables, eso sí, logró darle la vuelta al fondo de maniobra negativo del pasado curso y también presentó un ebitda ajustado positivo de 25,2 millones, más del doble que un año antes. Pese a ello, PwC continúa alertando en su auditoría de incertidumbres respecto a la viabilidad de la compañía.

Si bien EiDF ha acudido en varias ocasiones al mercado de emisión de bonos, el fortalecimiento de sus finanzas está pasando en buena medida por los acuerdos con particulares, como la alianza con Atitlan o las ventas a Brookfield, y por las aportaciones de los socios, que a cierre del ejercicio ascendían a 28,3 millones. La compañía prevé la conversión de los préstamos participativos para elevar los fondos propios hasta los 42 millones e incrementar en unos 34 millones el patrimonio neto. Este plan estaba pendiente de ejecutarse tras la celebración de la junta de accionistas, según trasladó el grupo en la presentación de sus resultados anuales.