A Sionlla y Morás tiran de la gestora de suelo de la Xunta, que reduce ventas a la mitad pero también números rojos
La cifra de negocio de Xestur cayó el pasado año de 41,6 a 23,8 millones de euros aunque las pérdidas de la entidad también se redujeron de los 1,4 millones a los 770.000 euros
Alfonso Rueda visita las obras del parque empresarial de Moras / David Cabezón
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Xestur, la gestora de suelo de la Xunta de Galicia, reduce su cifra de negocio pero también sus números rojos. El pasado año, las ventas de la entidad cayeron de los 41,6 millones de euros a los 23,9 millones de euros, aunque el batacazo tiene truco. Y es que 2022 fue un año con una facturación excepcional, que se disparó casi un 30% debido a los más de 22 millones de que recibió de la Corporación Hijos de Rivera para suelo sobre el que levantar su nueva planta en Morás (Arteixo). “Ese año se hizo una venta de un proyecto singular por lo que, si se compara la cifra de negocios sin esa venta extraordinaria pasaría a ser de 19,4 millones de euros en el año 2022 y de 23,9 millones de euros en 2023”, argumentan los administradores de la sociedad.
Según la información consultada por Economía Digital Galicia y recientemente remitida al Registro Mercantil, Xestur finalizó el pasado ejercicio reduciendo también sus números rojos. De un negativo de casi 1,5 millones de euros en 2022 pasó a unas pérdidas de 769.000 euros. En el balance de la sociedad gestora de suelo público influyeron unos ingresos financieros de 1,7 millones de euros.
Con unos gastos de personal que se elevaron desde los 2,4 a ls 2,8 millones de euros, los activos de la compañía pública suman 246 millones de euros mientras que el patrimonio neto se queda en 213 millones de euros.
Las ventas de 2023
Durante 2023, las ventas de parcelas en Arteixo y en A Sionlla, en Compostela fueron las que tiraron de la facturación de Xestur. De hecho, los propios administradores de la compañía destacan en su memoria anual “las ventas en A Sionlla por 10 millones de euros, Arteixo por 3,7 millones de euros, Ofimático (A Coruña), por 2,4 millones, As Gándaras (Lugo) por 1,6 millones de euros, Reigosa (Pontecaldelas) por 1,5 millones, Valdecorvos (Pontevedra), por 1,3 millones de euros y en el polígono de Mos por casi 2 millones de euros».
El pasado ejercicio, las inversiones de Xestur también se incrementaron hasta los 8,8 millones de euros frente a los 7,03 millones del año precedente.
Pese a la caída en la facturación, el pasado no fue un mal año para la sociedad presidida por Heriberto García Porto que, aún en pérdidas, continúa con su recuperación en cuanto a resultados desde el golpe que supuso la pandemia. En 2020, la facturación de Xestur cayó de los 17,1 a los 3,6 millones de euros, una cifra que incrementó hasta los 32,8 millones de euros en 2021 y hasta los 41,6 millones en 2022 gracias a la escritura del proyecto singular de Estrella Galicia por 22,2 millones de euros. No obstante, las pérdidas consiguieron minorarse, tras anotarse números rojos de 1,18 y 1,45 millones en los dos años precedentes.
Más de 60 parcelas adjudicadas
Por otro lado, en 2023, Xestur adjudicó 62 parcelas a 45 empresas con un total de 231.887 metros y un precio bonificado de algo más de 20 millones de euros. De ese total, los polígonos de la provincia de A Coruña son los que siguen tirando del carro. Así, el pasado ejercicio, la sociedad pública adjudicó un total de 30 parcelas en los polígonos de Arteixo, Carballo, Sionlla y Negreira con un precio de venta de 12,6 millones de euros, frente a los 3,5 millones de 22 parcelas en los parques lucenses (Cervo, As Gándaras y Muimenta), los cerca de 50.000 euros del parque de Vilamarín, en Ourense, y los 3,8 millones correspondientes a 9 parcelas en Pontevedra, en Reigosa, Mos y Silleda.
Explican los administradores de la compañía que la política de bonificaciones de suelo puesta en marcha para favorecer la implantación empresarial “no permite recuperar la totalidad de las inversiones realizadas, lo que produce pérdidas en Xestur y limita su capacidad de acometer nuevas inversiones”. Es por ello que “la Xunta, a través del Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS), socio mayoritario de Xestur, concede una transferencia anual desde el 2021 que financia nuevas inversiones y compensa las pérdidas derivadas de las bonificaciones aplicadas en las ventas”.
Para este 2024, el IGVS aprobó una nueva transferencia de cinco millones de euros para favorecer el acceso al suelo empresarial. El pasado año recibió 7 millones de euros, 7,5 millones en 2022 y 8 millones en 2021.
