Cupa, el rey de la pizarra, acaricia los 500 millones de negocio el año que absorbió Samaca

Cupa, una de las mayores compañías ourensanas y la principal pizarrera gallega, se aproximará a los 500 millones de facturación durante el ejercicio de 2024, que está a punto de cerrarse. El grupo que dirige Javier Fernández y que está controlado por el fondo Brookfield cumple las previsiones que avanzó el pasado junio, cuando adquirió la empresa del sector Samaca Irosa y vaticinó que rondaría los 500 millones de ingresos con su integración.

El resultado supone una mejora respecto al año pasado que va más allá del crecimiento inorgánico, estrategia que ha marcado los últimos años de la pizarrera con un puñado de adquisiciones como Pizarras Gallegas, Proinor, Lomba, la británica Burton Roofing o la norteamericana Vermont Slate, entre otras. Cupa pasa de los 437 millones de 2023, 465 millones si se cuenta la aportación de Samaca, a un 7% más, a la espera del cierre definitivo del ejercicio.

Esfuerzo inversor

La multinacional, que obtiene alrededor del 90% de sus ingresos en el mercado exterior, cuenta con unos 2.800 trabajadores y prevé redoblar su esfuerzo inversor para la mejora de sus plantas. Según avanza Diario de León, ha conseguido automatizar el 80% de las líneas de producción tras destinar 12 millones de euros a la mejora de las instalaciones en seis años. Ahora prevé invertir otro tanto en el próximo trienio para la incorporación de nueva maquinaria y tecnología para el tratamiento de la pizarra.

Además de la pizarra, que representa el 45% de los ingresos, Cupa cuenta también con otras áreas de actividad, como la piedra natural o la distribución de materiales para cubiertas. Cuenta con una treintena de canteras para extraer el material que luego exporta a más de 70 países.